Para comunicar las violencias machistas hay que entender el enfoque de género
Semlac/Seméxico en el activismo que debe para la violencia contra las mujeres
Sara Más, 16 días de activismo, 7º. día
SemMéxico/SEMlac, Cd. de México/La Habana, Cuba, 1º. de diciembre, 2024.-Los medios de comunicación pueden contribuir a reforzar las normas culturales y estereotipos que están en la base de las violencias machistas, pero también pueden ayudar a desmontar los mitos y visibilizar el maltrato.
Es necesario cuestionar y desmontar los mensajes que perpetúan la idea de que la violencia es aceptable o se justifica en determinadas circunstancias.
Es fundamental comprender que este tipo de violencia está arraigada en las estructuras de poder y desigualdades de género y buscar una representación equitativa de hombres y mujeres.
Es importante adoptar un enfoque interseccional en la comunicación, reconocer que las experiencias de violencia pueden ser diferentes según el color de la piel, las condiciones socioeconómicas, la orientación sexual o la identidad de género, el origen territorial y muchas otras variables.
Para comunicar las violencias machistas hay que entender el enfoque de género como una herramienta que busca analizar y transformar muchas creencias y mitos patriarcales presentes en nuestras sociedades.
Se trata de promover una comunicación inclusiva, equitativa y respetuosa:
✅Sensible y empática hacia las víctimas.
✅Que de voz a las personas afectadas y respete su privacidad y dignidad.
✅Que evite la revictimización y el sensacionalismo.
Violencia en las Redacciones de medios en América Latina
La violencia de género persiste en redacciones de prensa de América Latina, la mitad del vaso lleno dice que el 43 por ciento de los medios de comunicación han implementado protocolos para enfrentar casos de violencia de género.
Sin embargo, la mitad vacía revela una realidad preocupante: el 57 por ciento de los medios aún no cuenta con estas herramientas, según datos de Unesco divulgados este noviembre.
Esta realidad pone de relieve el largo camino por recorrer en la lucha contra la violencia de género en los espacios de trabajo periodístico de la región.
Desde 2015, con el impacto del movimiento Ni Una Menos que surgió en Argentina y se extendió a toda la región, los medios han estado bajo presión para abordar esta problemática. Casi una década después, aunque persisten los desafíos, ha habido avances en algunos medios que buscan responder a esta crisis.
La violencia de género, que históricamente se ha manifestado en los espacios físicos de trabajo, se ha intensificado en los últimos años con una nueva modalidad: la violencia digital, acompañada de discursos de odio y desinformación en redes sociales.
Un estudio reciente realizado por la Asociación Civil Comunicación para la Igualdad, de Argentina, en colaboración con la Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (Fepalc) y el apoyo del Programa Internacional para el Desarrollo de la Comunicación (PIDC), profundiza sobre esta problemática. Titulado “Protocolos de Violencia de Género contra Mujeres Periodistas en América Latina: ¿Qué hacen y qué deberían hacer las organizaciones de medios?”, el proyecto revela datos alarmantes sobre la prevalencia de violencia tanto online como offline en las redacciones de la región.
Una de las principales iniciativas del proyecto fue la creación de un “Protocolo Marco de Prevención y Acción ante la Discriminación, el Acoso y la Violencia en el Trabajo Periodístico”. Esta herramienta fue diseñada para ayudar a las organizaciones de noticias que aún no disponen de protocolos específicos, proporcionando pautas para prevenir y enfrentar situaciones de violencia de género.
El protocolo, desarrollado con la colaboración de 32 medios de 12 países, se construyó sobre la base de 27 protocolos existentes en 11 países de la región, algunos de ellos pertenecientes a organizaciones de noticias y sindicatos.
Navegando Como parte de las acciones del proyecto, se lanzó una campaña de sensibilización en redes sociales, donde comunicadores y periodistas de toda la región se unieron para visibilizar la violencia en las redacciones.
La campaña incluyó testimonios de figuras como Alejandra Malem, Alejandra Valle y Federico Pellegrino, y reunió un total de 44 piezas visuales que reflejan la realidad de esta problemática en los medios.
Los hallazgos de esta investigación ponen en evidencia la prevalencia de la violencia de género en el ámbito periodístico de América Latina.
Aunque algunos medios han avanzado en la creación de áreas específicas y protocolos, estos esfuerzos son insuficientes. El liderazgo en los medios de la región sigue estando condicionado por dinámicas de poder que propician un ambiente hostil para las mujeres periodistas.
En respuesta, muchas de ellas recurren al apoyo de sindicatos y redes de periodistas especializados, que actúan como un sostén vital ante estas situaciones. Mientras, queda claro que la implementación de protocolos y políticas efectivas es una tarea pendiente para garantizar un entorno de trabajo seguro e inclusivo en las redacciones de noticias de América Latina.