Fue estremecedor saber que, por miedo extremo, se había exiliado por sexta vez Alberto Escorcia, ese reportero mexicano que transitó acelerada y extraordinariamente al manejo digital de la información hasta convertirse, probablemente en el primero de su tipo.
La pintora y feminista fue autora de un amplio y singular corpus literario que oscila entre el apunte autobiográfico, la poesía lírica y la indagación filosófica.