Eva Disidente 2ª. Época
Con avances y retrocesos se construye la nueva Gambia
SemMéxico. Cd de México, 23 de junio 2017.En la actualidad, la diputada Fatoumata Jawara trabaja en el parlamento en la reforma de la Ley de Prensa, porque los periodistas no tienen reconocido ningún derecho, y también en la renovación de las fuerzas del orden.
Los soldados de la misión de la Comunidad de Estados de África Occidental en Gambia deben quedarse más tiempo y ayudar a crear un nuevo Ejército, una nueva policía. Las tropas africanas, lideradas por Senegal, aún hacen frente a cierta resistencia de partidarios del antiguo régimen dictatorial.
Con avances y retrocesos se construye la nueva Gambia, excluida de momento la opción de solicitar la extradición del dictador Jammeh, el Gobierno trabaja en varios frentes con no pocas dificultades presupuestales que se notan en los frecuentes cortes de luz que sufre la capital, más que en la época anterior, y los problemas de abastecimiento de agua. El Ministerio de Justicia cuantificó la dimensión del dinero robado por Jammeh antes de su precipitada salida del país (45 millones de euros).
Se le han congelado 88 cuentas bancarias a su nombre y 14 de las empresas que controlaba-
Tras pasar ocho meses en la cárcel, Jawara regresó en diciembre pasado a su modesta casa de planta baja con un enorme patio, en un barrio popular de la capital, atravesado por calles de arena. Jammeh estaba aún en el poder pero su derrota electoral abrió las puertas de las cárceles a los presos políticos.
Allí, la desnudaron, la golpearon hasta casi matarla y llamaron a una docena de hombres para que asistieran a la humillación.
Entonces ella les dijo, con un hilo de voz, que iba a morir sobre aquella mesa si la violaban. Un año después de aquel horror que vivió en una lóbrega habitación de los servicios de Inteligencia del Estado Fatoumata Jawara se ha convertido en flamante diputada en la Asamblea Nacional de Gambia y miembro del Parlamento Panamericano.
Y dice: » Quiero justicia, no venganza. Puedo perdonar a quienes me hicieron todo aquello, pero deben reconocerlo, decir la verdad». Asegura enfáticamente esta mujer de 30 años y madre de tres hijos que se ha convertido en el rostro de un nuevo país que emerge sobre las cenizas del régimen dictatorial de Yahya Jamemeh, hoy exilado en Guinea Ecuatorial tras 22 años en el poder.