Con el sexenio a contrarreloj, a Su Alteza Serenísima se le agotan los pretextos para justificar el incumplimiento de promesas de campaña. Su campaña personal.
“El miedo no anda en burro”, tuiteó el heroico toreador de balas en el frente de batalla, el licenciado cámara Epigmenio Ibarra respecto de la ausencia del culto Enrique Peña Nieto en la boda de su hija Paulina
¡Felicidades, Su Alteza Serenísima! ¡Felicidades! Es el más chingón de la pradera; mentirosillo, mentirosillo, con la aureola del rencor que le ilumina predestinado.