Afroféminas celebra en Barcelona el “Día de la mujer Afrodescendiente” con un evento reivindicativo y de autorreconocimiento que pretende visibilizar esta fecha en el contexto del Estado español y Catalunya.
Gloria López
SemMéxico/AmecoPress. Madrid. 25 julio .2019.- Ser una persona afrodescendiente implica algunas exposiciones. Puedes haber nacido en España, pero te preguntarán con insistencia de dónde eres, porque tus rasgos no coinciden con “los españoles”. A veces, se acercarán a tocarte el ‘pelo afro’. En muchas ocasiones, si eres mujer afrodescendiente verás asociado tu cuerpo con erotismo, de forma automática, y te verás convertida de este modo en objeto exótico y sexual. La lista de discriminaciones racistas y situaciones violentas que experimentan cada día personas no blancas es amplia. Las mujeres, más. Pero quizás una de las cosas que llama más la atención es su invisibilización. De hecho, hoy es el Día de la Mujer Afrodescendiente y su celebración pasa sin pena ni gloria.
Así lo denuncian Afroféminas e Hibiscus Afro. “Esto da mucho que pensar sobre el futuro que espera a las nuevas generaciones de mujeres negras que hoy están creciendo aquí: un futuro de invisibilización, rechazo, negación y cuestionamiento. Podemos y debemos evitarlo”, aseguran.
Por este motivo el próximo viernes 26 de julio Afroféminas celebra en Barcelona el “Día de la mujer Afrodescendiente” con un evento reivindicativo y de autorreconocimiento que pretende visibilizar esta fecha en el contexto del Estado español y Catalunya. Fue en 1992, durante el Primer Encuentro de Mujeres Afrolatinas y Afrocaribeñas, cuando se instituyó el 25 de julio como día conmemorativo de las luchas y resistencias de las mujeres afro contra la opresión misógino-racista indivisible de la que son objeto. “Para visibilizar y reconocer nuestra resistencia frente al racismo y el sexismo estructurales”.
“Hoy es un día para nosotras. Hay que celebrar, sin duda, lo conseguido. Hay que celebrar las pequeñas batallas ganadas. Pero no hay que bajar la guardia porque nos falta un mundo por cambiar”, exponen desde Afroféminas.
“El estereotipo más común es el de la mujer afrodescendiente hipersexualizada como objeto, es decir, expuesta como cosa y vulnerabilizada ante el deseo de posesión ajeno, sin posibilidad de manifestarse por ella misma”
Todavía hay mucho que cambiar. Según la Red Iberoamericana de Organismos y Organizaciones contra la Discriminación (RIOOD) “aún persisten miradas y prácticas discriminatorias que estigmatizan a la mujer afro, herederas de la historia de violencia perpetrada. El estereotipo más común es el de la mujer afrodescendiente hipersexualizada como objeto, es decir, expuesta como cosa y vulnerabilizada ante el deseo de posesión ajeno, sin posibilidad de manifestarse por ella misma”.
Este sometimiento de género, según esta red, “se suma a la situación de precariedad y exclusión a la que fueron sometidos los y las afrodescendientes debido a una discriminación racista que los invisibilizó y los excluyó, generando una situación de múltiple vulnerabilidad en el colectivo de mujeres afrodescendientes”.
Es fácil identificar a las mujeres afrodescendientes con ideas preconcebidas difundidas por los titulares de los medios de comunicación y los creadores de noticias. Pero no podemos negar la embestida del afrofeminismo, en todo el mundo y también dentro de las fronteras del Estado español. Sus reclamos estimulan la lucha feminista común, aunque también cuestionan lo establecido y nos interpela.
Porque las categorías antiguas son incapaces de apresar la realidad que muta. Poco a poco hemos disipado la errónea percepción de que el feminismo es “una cosa de blancas”, por y para las mujeres blancas. También vamos defendiendo la diversidad de las mujeres, apartándonos de concepciones que nos homogenizan.
Pero comprender cómo se cruzan las distintas discriminaciones y captar que esa mirada no resta fuerza a la lucha feminista, sino todo lo contrario, no está siendo fácil. Separar las identidades, y de hecho las experiencias que surgen como consecuencia de esas identidades, es altamente inverosímil. Como dijo Audre Lorde, “no hay nada como una lucha de un solo problema porque no vivimos vidas de un solo problema”. En ese sentido, “la praxis interseccional es crucial para que exista la hermandad feminista. Tiene el poder de fomentar la solidaridad entre mujeres, todas las mujeres, y fortalecer nuestro movimiento”, en palabras de Claire Heuchan, afrofeminista escocesa y editora del blog Sister Outrider.
Encuentro en Barcelona
Ese es “el futuro que queremos trenzar” y que inspirará mañana, el Encuentro que Afroféminas celebrará en Barcelona. Comenzará a las 17 horas con un coloquio llamado “Trenzando Alianzas”, planteado como un espacio de debate y reflexión colectiva entre mujeres afrodescendientes para trazar las reivindicaciones y prioridades de lucha del movimiento afrofeminista en España. El debate es un espacio no mixto reservado a mujeres afrodescendientes y es una actividad gratuita.
A continuación, a partir de las 19 horas, la muestra de arte Artística-Mente contará con las actuaciones de Montserrat Anguiano, Nêga Lucas y Krudas Cubensi , tres artistas que ofrecerán una muestra de su arte desde la femineidad afro. Las actuaciones están abiertas a todo público y tendrán taquilla inversa para que cada persona aporte según su capacidad y el beneficio será una donación para las compañeras de Suport Casa Àfrica por iniciativa de las propias artistas y con todo el apoyo de la organización, que considera que “en estos duros momentos que están atravesando las compañeras que la habitan necesitan todo el apoyo de nuestra comunidad”. Al final del evento las compañeras de Abarka catering deleitaran con su gastronomía.
