La sociedad de cuidados y la igualdad entre mujeres y hombres solo posibles si se garantizan todos los derechos humanos de las mujeres
Declaración política del Foro Alterno Feminista Alterno, entregado a las delegaciones de la Reunión de CEPAL
Carta Pública de la Red Nacional de Refugios pide no convalidar la simulación con cara de austeridad que condena a las mujeres a la violencia
Libertad López
SemMéxico, Cd. de México, 13 de agosto, 2025.- Decenas de feministas, colectiva y grupos que se asumen feministas abolicionistas, de América Latina y el Caribe, que celebraron el Foro Alterno Feminista, en el marco de la XVI Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y El Caribe, afirmaron, en un llamado que hoy en el mundo los cuidados reproducen las desigualdades, las mujeres viven procesos contra su salud, de violencia y discriminación y no pueden acceder a su autonomía económica.
Reclaman que no se puede hablar de cuidados y derechos a plenitud, cuando se ha instalado como política económica donde se vive una crisis con instrumentos de despojo desde el Estado, como son la austeridad y la desigualdad.
El llamamiento fue entregado a los gobiernos en el pleno de la Conferencia que sesiona por segundo día en el Centro Cultural Tlatelolco.
Paralelamente en Carta Abierta la Red Nacional de Refugios, A.C., una vez más alzaron la voz para exigir al Estado mexicano que deje de invisibilizar a quienes día a día sostenemos la vida de mujeres, niñas y niños que enfrentan violencias machistas, en esa Red que no recibe los recursos en el octavo mes de 2025 y coinciden en los estragos de una política de austeridad que ha dejado a millones de mujeres atrás.
Ambos grupos afirman que los organismo internacionales no deben convalidar la simulación de “llegamos todas” y es tiempo de mujeres, mientras continúa se mantienen condiciones deplorables para las mexicanas, tanto económica como socialmente y se pretenda engañar con discursos y promesa; reiteran que los informes del gobierno mienten a los organismos internacionales. Los Refugios, fundamentales e históricos, por ejemplo, languidecen por falta de recursos.
Las abolicionistas sostienen que una sociedad de cuidados, que se quiere enarbolar como un nuevo paradigma, no puede sostenerse en la desigualdad entre mujeres y hombres ni en la discriminación contra ellas.
Relaman es indispensable transformar el orden y las prácticas sociales, así como eliminar el modelo económico neoliberal que en el contexto actual de geopolítica y geoeconomía sostiene la jerarquía en los gobiernos.
La Red de Refugios por su parte exige al gobierno mexicano: Respuestas claras y públicas, voluntad política real y sostenida, pago íntegro de honorarios por los 10 meses trabajados, conforme a los lineamientos oficiales; entrega inmediata del presupuesto asignado a todos los Refugios y Centros de Atención Externa, publicación urgente de la segunda convocatoria del Programa, presupuesto garante y progresivo 2026.
Ambos grupos reclaman al gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo diálogo permanente, feminista y respetuoso, desde el reconocimiento pleno de sus voces y trayectoria.
Las abolicionistas razonan
El feminismo ha documentado, analizado y señalado la histórica e injusta organización social de los cuidados que reproduce las desigualdades entre mujeres y hombres, que se cruzan y agravan con otras condiciones sociales, como la clase, la etnia, la discapacidad y la edad, y que representan un obstáculo para la autonomía y desarrollo pleno de las mujeres.
La sobrecarga de cuidados en las mujeres impacta de manera negativa en su salud integral, en el goce efectivo de su derecho al tiempo propio (trabajo remunerado, estudio, participación política y social, autocuidado, esparcimiento) y a ejercer su autonomía, entendida como “la capacidad de las personas para tomar decisiones libres e informadas sobre sus vidas, de manera de poder ser y hacer en función de sus propias aspiraciones, en el contexto histórico que las hace posibles”, de acuerdo con la CEPAL.
Definen que una sociedad de cuidados no puede sostenerse en la desigualdad entre mujeres y hombres ni en la discriminación contra ellas, por lo que es indispensable transformar el orden y las prácticas sociales, así como eliminar el modelo económico neoliberal que en el contexto actual de geopolítica y geoeconomía sostiene la jerarquía de las crisis e instrumentos de despojo desde el Estado, como son la austeridad y la desigualdad
Lo que sucede en la región es que se ha precarizado la vida, debilitado los Estado y a las propias agencias de la ONU, descargando sobre las mujeres el costo de la austeridad.
Es urgente una hoja de ruta que oriente los compromisos y acciones que se acuerden en la Conferencia Regional, con los estándares más altos relacionados con el derecho al trabajo digno, a las condiciones de igualdad entre mujeres y hombres en el matrimonio y las relaciones familiares.
También urge modificar los patrones socioculturales de conducta de hombres y mujeres, con miras a alcanzar la eliminación de los prejuicios y las prácticas consuetudinarias basadas en la idea de la inferioridad o superioridad de cualquiera de los sexos o en funciones estereotipadas de hombres y mujeres.
Si la conferencia no toma en cuenta estos y otros aspecto la propuesta de una sociedad de cuidados queda hueca.
En ese contexto debe ponerse en el centro la erradicación de la violencia contra las mujeres y destinar los recursos financieros, estructurales y humanos adecuados y suficientes para operar y evaluar las políticas de prevención de la violencia.
Proponen nueve modificaciones jurídicas y rescatar el trabajo digno.
CARTA ABIERTA A LAS AUTORIDADES GUBERNAMENTALES Y A LA COMUNIDAD INTERNACIONAL
Desde la Red Nacional de Refugios, A.C., alzamos la voz, una vez más, para exigir al Estado mexicano que deje de invisibilizar a quienes día a día sostenemos la vida de mujeres, niñas y niños que enfrentan violencias machistas.
Quienes integramos esta Red nacional feminista acompañamos, protegemos y transformamos el dolor en dignidad desde hace más de dos décadas. Somos parte esencial del sistema de atención a las violencias, aunque el Estado insista en tratarnos como actoras secundarias.
En los últimos seis años, la Red Nacional de Refugios salvó la vida de 190 mil 140 mujeres, niñas y niños en México.
A pesar de nuestras solicitudes de reunión, comunicaciones formales y mensajes directos, la Secretaría de las Mujeres no ha respondido sobre temas urgentes: la publicación de la segunda convocatoria de subsidios, el pago completo de honorarios y la realización de mesas de trabajo que garanticen la operación de los refugios.
Mientras se anuncian foros, se inauguran espacios sin estrategia ni sostenibilidad y se llenan discursos con promesas, los refugios seguimos resistiendo sin certezas, sin respuestas y con presupuestos que llegan a cuentagotas —cuando llegan. Esta omisión no es técnica: es política. Y tiene consecuencias reales en la vida de miles de mujeres, niñas y niños.
El presupuesto a refugios no solo se ha estancado desde el sexenio pasado: en 2025 se redujo un 4.3% (21.8 millones de pesos menos). El gobierno actual ha debilitado estos espacios de protección a través del silencio institucional, la falta de diálogo y la persecución a quienes denunciamos. La entrega fragmentada del presupuesto y la ausencia de voluntad política son decisiones que perpetúan la violencia institucional.
Cada año, los procesos para acceder a recursos son más lentos y burocráticos. Y cada año, las redes feministas tenemos que hacer más con menos. La dilación institucional no es neutral: impacta directamente en la protección, la atención integral y las posibilidades de vida de miles de mujeres y sus hijas e hijos. El silencio del Estado también es violencia.
La CEDAW lo reafirmó en julio: la violencia contra las mujeres es una realidad estructural en México. Frente a esta emergencia no bastan discursos: se requieren acciones concretas, presupuestos garantes y voluntad política real.
Los refugios no pueden seguir dependiendo de convocatorias temporales o de intereses partidistas. Deben ser política de Estado, respaldada por un compromiso sostenido. La vida de las mujeres no es negociable.
Llaman finalmente a las organizaciones, medios y organismos nacionales e internacionales reunidos en la CEPAL a no legitimar la simulación.