- La plataforma lanza campañas de recaudación para personas con discapacidad que quieren alcanzar sus sueños
- 3 de diciembre, Día Internacional de Personas con Discapacidad
Redacción
SemMéxico, Cd. de México, 2 de diciembre, 2024.- GoFundMe, una plataforma de recaudación de fondos, a propósito del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, conmemoración que invita a reflexionar, promover la inclusión y apoyar iniciativas que mejoren la calidad de vida de las personas con discapacidades.
Este día también coincide con #UnDíaParaDar, una iniciativa global que fomenta la generosidad y el impacto positivo, en ese sentido, en GoFundMe creemos en el poder de las historias para inspirar y generar cambios y comparte algunas de esas iniciativas en México que han transformado vidas gracias a la solidaridad.
Las historias que se cuentan son las de Danna bailarina de paradanza, de Grecia que quiere ser cineasta, de Palmira que quiere correr en la Maratón de Nueva York, de Diego quiere atravesar el Mediterráneo, Kiowa un niño que necesita una prótesis de brazo y también presenta el trabajo colectivo de Piña Palmera en la costa de Oaxaca y de Bríos en Monterrey, acciones colectivas que buscan mejorar la vida de las personas con discapacidad.
Danna Novelo bailarina de paradanza
Danna Novelo es una talentosa bailarina de paradanza deportiva originaria de Cancún, que busca apoyo para competir en Europa el próximo año. A pesar de que ya ha ganado medallas en torneos nacionales, necesita adquirir una silla de ruedas especial para la danza, un requisito en las competencias internacionales. Para lograrlo, se apoya en una colecta solidaria a través de la plataforma en línea GoFundMe.
“El baile ha sido mi vida desde que nací”, cuenta esta joven que practica paradanza deportiva. Es una disciplina para atletas con discapacidades físicas que afectan la parte inferior de su cuerpo impidiendo su movilidad, por lo que bailan apoyándose en una silla de ruedas especial.
Este deporte comenzó a practicarse a finales de la década de los sesenta en Suecia con fines recreativos y de rehabilitación, pero ha crecido en todo el mundo con ritmos que van desde el vals y tango hasta samba, chachachá y rumba.
En septiembre pasado, Danna destacó en los Juegos Paranacionales de la CONADE ganando dos medallas de bronce en las categorías single convencional y single freestyle. Esta gran presentación le abrió las puertas para competir internacionalmente, invitada a un torneo en Holanda a celebrarse en abril del 2025.
“Uno de los requisitos para poder competir a nivel internacional es tener una silla especial de danza, la cual no tengo y por eso les pido que me ayuden”, explica Danna.
La silla de ruedas especializada para la danza que ella necesita, está elaborada bajo las características del reglamento del Comité Paralímpico Internacional. Fabricada a la medida con aluminio ligero, centro de gravedad fijo y rodamiento trasero desmontable. Esta bailarina cancunense estima que tiene un costo de 30 mil pesos con la marca mexicana Lince.
Para lograr reunir esa cantidad, Danna ha recurrido al apoyo solidario de sus familiares, amigos y la comunidad en general a través de una recaudación de fondos. En quince días lleva casi la mitad del dinero recaudado, gracias a once donaciones. Cualquier persona se puede sumar con aportaciones desde los 100 pesos para hacer realidad el sueño de esta joven.
“Todavía estoy trabajando para alcanzar mi objetivo y te pido que compartas esta campaña de recaudación de fondos con tus redes para ayudar a difundir la información. Cada donación, sin importar el tamaño, me acerca un paso más a hacer realidad mi sueño”, concluye.
Puedes sumarte a la causa aquí: https://gofund.me/97dc3d73
Una silla de ruedas eléctrica para Grecia
Una adolescente cancunense está cerca de cumplir un sueño: tener una silla de ruedas eléctrica que le dé mayor independencia. Para poder comprarla, Grecia Olguin Espinola ha movilizado decenas de donaciones en una colecta solidaria que suma casi 20 mil pesos en veinte días. ¡Le falta el último empujoncito para llegar a la meta!
“Necesito la silla de ruedas eléctrica más que nada para moverme afuera, sin necesidad de alguna ayuda extra. Se me haría la vida muchísimo más fácil. Más que nada, para tener una vida afuera y no quedarme todo el tiempo en mi casa”, cuenta esta estudiante de preparatoria que está a punto de cumplir 18 años de edad.
Grecia sueña con convertirse en una directora de cine, su gran pasión. La silla de ruedas eléctrica le permitiría tener mayor movilidad e independencia para grabar, comenzar sus propios proyectos, y seguir aprendiendo sobre la producción cinematográfica y otras artes.
Recientemente fue premiada con una mención especial en el Concurso Nacional de Fotografía sobre Derechos Humanos del Instituto Politécnico Nacional, en el que participaron jóvenes de todo el país de entre 12 y 29 años. Su fotografía, titulada “Innovación social”, muestra a un par de jóvenes en sillas de ruedas conversando.
Con ese mismo impulso, ha hecho grandes esfuerzos para comprarse la silla eléctrica y adquirir los materiales necesarios para estudiar cine. Dando una enorme muestra de amor propio y superación, comenzó a juntar dinero vendiendo postres en un negocio que llamó Panqué Gresi, en el que invita a la gente a probar sus productos.
También recurrió al apoyo solidario de su familia, amigos, compañeros de la escuela y la comunidad cancunense en general. Con ayuda de su mamá, abrió una campaña de recaudación en GoFundMe, con la meta de llegar a los 23 mil pesos. Al momento ha logrado juntar el 75 por ciento del monto, gracias a 28 donaciones que la acercan a cumplir sus sueños.
“Invitarlos a que puedan unirse a la causa ya sea comprando productos de Panqué Gresi, donando o pueden también compartir este video con sus amigos. Les agradeceríamos mucho si nos apoyan, así me ayudarían a tener una mejor calidad de vida”, concluye la joven.
Puedes apoyarla con aportaciones desde los 100 pesos aquí: https://gofund.me/0f25829e
Palmira sueña con el maratón de Nueva York
La deportista mexicana Palmira Martinez Cárdenas pide ayuda para cumplir un sueño: correr el maratón de Nueva York. Ella nació con una malformación en el nervio óptico que le impide ver, pero ha encontrado en el atletismo un camino para alcanzar sus metas. Ahora, para poder cubrir los gastos del viaje a esta icónica competencia, ha organizado una colecta solidaria en línea con la esperanza de reunir 50 mil pesos.
Para Palmira, correr significa derribar cualquier barrera; la hace sentir libre. Cuenta que, debido a su condición, al inicio dudaba de poder realizar alguna actividad física. Comenzó caminando, luego corriendo y ha llegado hasta subirse al podio del maratón de la Ciudad de México en las últimas cinco ediciones.
Para lograrlo, se apoya en corredores guía que utilizan una cinta de tela amarrada por las muñecas para dirigir el trayecto por medio de los brazos. Además, le van indicando por dónde avanzar y señalando irregularidades en el suelo. Pero no sólo eso, también les van narrando el paisaje que recorren.
A sus 52 años, Palmira quiere ser la próxima deportista mexicana en cruzar las calles de Manhattan hasta llegar a la meta en el Central Park.
La competencia se realizará el próximo 3 de noviembre, por lo que Palmira busca apoyo comunitario a través de una recaudación de fondos que le permita pagar los vuelos a Nueva York y viáticos para su estancia. Cualquier persona se puede sumar con aportaciones desde los 100 pesos.
Puedes sumarte a la causa aquí: https://gofund.me/7520a00b
Diego quiere atravesar el Mediterráneo
Imagina la fuerza de un mar abierto, la determinación de un padre y el valor de un gesto repetido 33 mil 300 veces por una causa: ayudar a decenas de jóvenes a sentirse libres pese a su discapacidad.
En el horizonte del Mediterráneo, la travesía de Diego será un símbolo de esperanza y solidaridad para quienes más lo necesitan. Diego es un padre que nadará 33.3 kilómetros a través de aguas griegas, levantando sus brazos una y otra vez, con el propósito de cambiar vidas en el evento Ultra-Swim 33.3.
Diego no lo hace por el desafío personal, ni por la gloria de la meta alcanzada. Lo hace por su hijo y por más de 110 jóvenes y adultos con capacidades intelectuales diferentes que viven en CADI, un centro en el Estado de México que alberga a quienes enfrentan no solo la dificultad de un trastorno intelectual, sino también, en su mayoría, una situación de orfandad.
El CADI se convierte en su hogar, escuela y lugar de desarrollo.
Cada día, los miembros de CADI levantan sus brazos para aprender, enseñar y demostrar que sus condiciones no son una barrera, sino una oportunidad para crecer. En este contexto, cada brazada de Diego en el Mediterráneo simboliza una batalla ganada contra las limitaciones, un paso más cerca de una vida independiente y feliz para estos jóvenes y adultos.
Diego quiere completar el reto que le permitirá reunir apoyo suficiente para que el CADI siga siendo el hogar, escuela y lugar de desarrollo de todos estos jóvenes, pero antes, debe reunir una cantidad significativa de dinero para lograr llegar a Grecia.
“Buscamos 33 mil 300 brazos que se levanten en apoyo a CADI, que se unan en un gesto de solidaridad. Cada dólar o euro que dones se convierte en una brazada más en la misión de Diego, en cada metro recorrido, en cada oportunidad brindada”, escribieron los recaudadores.
La meta fue fijada en 666 mil pesos, de los cuales, se han reunido poco más del 20 por ciento gracias a la donación de 77 personas.
Tu contribución no solo apoya el esfuerzo de Diego, sino que también fortalece la misión de CADI, ayudando a generar un futuro más prometedor para quienes luchan día a día por su independencia y felicidad.
¿Deseas formar parte de la iniciativa? Da clic y dona aquí: https://gofund.me/dbb1e6f5
Una prótesis de brazo “como Iron Man” para Kiowa
Un niño nayarita de once años de edad, amante de los deportes, busca una avanzada prótesis de brazo que le permita desarrollarse plenamente. Su familia ha explorado varias opciones hasta llegar a una clínica especializada en Los Ángeles que le ofrece un brazo biónico personalizado impreso en 3D. “Como de Iron Man”, así lo describe este pequeño.
Ahora el reto para sus padres consiste en poder financiar la prótesis que cuesta casi medio millón de pesos. Se apoyan en una colecta por medio de la página GoFundMe, haciendo un llamado a la solidaridad de familiares, amigos e incluso personas desconocidas.
Kiowa Sol nació con una diferencia en una extremidad del lado izquierdo de su cuerpo, causada por daños en la placenta durante el embarazo. Su brazo izquierdo no se terminó de desarrollar desde el codo hacia abajo y no tiene la mano completa; además, a su pierna izquierda le faltan varios huesos.
Pese a esta condición, sus padres lo describen como un niño muy hábil y ágil interesado por practicar múltiples actividades desde deportes hasta oficios y artes. Hace de todo con su pequeño brazo: dibujar y usar tijeras, bordar, alfarería, montar a caballo y bicicleta, taekwondo, tiro con arco, carpintería, natación y futbol.
“Es activo y brillante y ha sido un ejemplo para muchos niños motivándolos a ser audaces, valientes y creativos con sus cuerpos y sus habilidades. Ha aprendido a afrontar la vida con la diferencia de sus extremidades y a utilizar su cuerpo de maneras que muchos nunca imaginaron que podría hacerlo”, cuenta su madre, Nicole Majewski.
Desde hace tres años, sus padres han explorado opciones para una prótesis que le ayude a tener mayor autonomía e independencia en sus rutinas diarias. Así llegaron a los dispositivos médicos Hero Arm de la empresa británica Open Bionics, que incluso tienen un diseño especial como el superhéroe Iron Man.
“Estos diseños muestran que tu singularidad es tu superpoder y no debes sentir que tienes que ocultar la diferencia de tus extremidades; en lugar de eso, puedes mostrarla”, explican.
Esta familia viajó a una clínica en Los Ángeles en agosto pasado, donde Kiowa pudo probar este brazo biónico adaptándose muy bien.
La necesidad de contar con esta prótesis se hizo más evidente apenas después de volver del viaje, cuando este pequeño nayarita se rompió el meñique jugando futbol. Ese accidente inesperado y desafortunado fue impactante. Sin su mano completa, está extremadamente limitado en lo que puede hacer por sí solo.
Ya han comenzado a planear un nuevo viaje a Estados Unidos en diciembre próximo para poder adquirir el brazo biónico para Kiowa. Sin embargo, aún necesitan apoyo para poder cubrir por completo el costo de la prótesis. Cualquier persona se puede sumar con donaciones desde sólo 100 pesos.
Hasta ahora llevan poco más de 70 mil pesos gracias a 37 aportaciones. “Es una muestra increíble de humanidad y espíritu de cómo la gente puede apoyar con lo que tiene, aunque no sea económicamente, también compartiendo el mensaje, con apoyo emocional e incluso con su emoción por lograrlo. Ha sido una experiencia muy linda para nosotros hasta ahora, con mucha gratitud”, concluye su madre.
Puedes unirte a la causa aquí: https://gofund.me/f7da3b8f
Piña Palmera, inclusión social para Oaxaca
Desde hace 40 años, la asociación civil Piña Palmera ha acompañado la rehabilitación e inclusión de más de cinco mil personas con discapacidades en Oaxaca. Con un enfoque comunitario, trabajan en seis poblaciones rurales e indígenas de la Sierra Sur, el Istmo y la Costa, que consideran “las más excluidas entre las excluidas”. Para poder continuar con su labor, buscan apoyo a través de donaciones voluntarias en una colecta solidaria.
“Para Piña Palmera, el trabajo con las personas con discapacidad y en particular en las comunidades rurales e indígenas, que son las más excluidas entre las excluidas, es claramente un asunto de justicia social y una asignatura pendiente en materia de derechos humanos que al Estado no le ha interesado atender”, explican.
El proyecto comenzó en 1984 por iniciativa de un médico tradicional estadounidense. Se enfrentó a la falta de cuidados y rehabilitación para menores con discapacidad, así como las pocas posibilidades de sus familias para atender sus necesidades. En respuesta, fundó un albergue que a la fecha sigue funcionando en Zipolite.
Sin embargo, con el paso del tiempo, han transitado hacia un enfoque comunitario. No se trata solamente de la rehabilitación a través de terapias físicas o de lenguaje, sino de lograr que existan las condiciones que les permitan desarrollarse socialmente con independencia. Esto se traduce en proyectos integrales con el personal médico, las autoridades municipales, escuelas, transportistas, comerciantes y vecinos en apoyo de las personas con discapacidad.
“En un largo proceso de aprendizaje y reaprendizaje, la organización ha creado su propia metodología de trabajo con personas con y sin discapacidad sobre una concepción basada en una ética del cuidado y la justicia social, no en el asistencialismo ni la caridad”, cuentan.
Hoy en día trabajan en los municipios de San Pedro Pochutla, Santa Maria Tonameca, San Pedro Mixtepec, Santa Maria Colotepec, Candelaria Loxicha y Santo Domingo de Morelos, con visitas a las comunidades, valoración de casos, capacitaciones y acompañamiento. Además, ofrecen talleres para la producción de artesanías, aceite de coco, cosméticos naturales, carpintería y cultivos en un huerto, para incentivar su autosuficiencia económica.
El trabajo de Piña Palmera ha sido reconocido por organizaciones como la UNICEF y el Conapred, e incluso han dado asesoramiento a instituciones de otros países en América Latina. Sin embargo,su labor se sustenta en donaciones solidarias. Este año, al cumplir cuatro décadas de acción comunitaria, lanzaron una colecta a través de la plataforma GoFundMe con la meta de recaudar los fondos necesarios para seguir cambiando vidas.
Puedes sumarte a la causa aquí: https://gofund.me/69838d1f
Centro Bríos, Monterrey
Durante 27 años, el centro de rehabilitación Bríos ha atendido a más de 15 mil niños de escasos recursos que padecen discapacidades neuromotoras. Esta asociación civil regiomontana ofrece cinco diferentes tipos de terapias, en muchos casos de forma gratuita. Para poder continuar su labor, organizaron una colecta solidaria pues se apoyan en las donaciones como su principal fuente de financiamiento.
Es un espacio de rehabilitación y guardería especial para infantes con trastornos como parálisis cerebral y síndrome de Down. Ofrecen terapias acuáticas, físicas, psicológicas y de lenguaje, para que puedan valerse por sí mismos. La meta es que puedan desarrollarse libremente para escoger las opciones a su alcance, y perseguir su propia felicidad y bienestar.
Su labor humanitaria tiene un impacto directo en la sociedad: desde 1997, han logrado que 125 niñas y niños se integren a escuelas regulares para continuar sus estudios.
Actualmente, esta organización regiomontana tiene capacidad para atender mensualmente en promedio a 80 niñas y niños de entre 45 días de nacidos y 14 años de edad. Al año imparten más de 82 mil terapias en su centro de rehabilitación ubicado en la colonia Jesús M. Garza de San Pedro Garza García.
“Para poder seguir becando a niños para que puedan recibir sus terapias y poder desarrollarse en sus capacidades, vengo a pedir tu apoyo, a pedirte sumarte a esta hermosa causa y que juntos podamos seguir transformando más vidas”, explica Isabella Padilla, voluntaria de la organización desde hace 5 años en el área de recaudación de fondos.
Aunque el centro recibe apoyo del gobierno estatal, fundaciones y empresas, un apoyo muy importante para poder financiar sus actividades son las donaciones solidarias. Hace unos días abrieron una colecta en línea con la meta de reunir 150 mil pesos que les permitan seguir ofreciendo becas.
En sólo diez días, han logrado sumar más de 29 mil pesos gracias a 30 donaciones. Cualquier persona se puede sumar con aportaciones desde los 100 pesos a través de la plataforma en línea GoFundMe.
Puedes apoyar la causa aquí: https://gofund.me/2f51e82c
FOTO CENTRO BRÍOS