Discriminatorio el Nuevo Premio del ISC
• Premio Sonora a la Cultura y Las Artes.
SemMéxico, 7 septiembre 2018.- Coincidiendo con su 30° aniversario, el ISC convocó el pasado día tres al Premio Sonora a la Cultura y Las Artes.
Esta novedad ha sido recibida, desde luego, con mucho gusto por los cultureros de aquí de Sonora, pero tiene una seria discriminación a la que nos referiremos más adelante -para privilegiar primero lo importante del evento.
Por primera vez se otorgará ésta presea que se suma a otros galardones, tanto como a ferias culturales, exposiciones y demás actividades que el titular del ISC, Mario Welfo Álvarez Beltrán ha promovido exitosamente a lo largo de su gestión.
Con ella, se reconocerá la labor y el compromiso de artistas y colectivos con el desarrollo de las artes y la cultura en la entidad, así como su impacto social y su trascendencia en beneficio de los sonorenses.
El premio consistirá en un diploma, la presentación del legado en el Palacio de Bellas Artes en la CDMX, un estímulo económico de cien mil pesos, entre otros beneficios, que serán entregados en una ceremonia de gala presidida por la gobernadora Claudia Pavlovich Arellano, con el acompañamiento de la Orquesta Filarmónica de Sonora, a finales del mes de noviembre.
Pero hay un detalle discriminatorio en la convocatoria –la cual ya está abierta en el portal www.isc.gob.mx/convocatorias y se cerrará el próximo cinco de Octubre– cuando entre otros requisitos ordinarios, y desde luego que se trate de artistas y de personas que hayan trabajado en la gestión y promoción cultural, se exige la exclusividad para sonorenses “de nacimiento” (según lo señaló el titular del ISC a los medios y como así lo establece la invitación a participar).
Es inusitada esa restricción porque no está establecida en ley alguna. Empezando por nuestra Constitución que señala en su artículo noveno que son (somos) sonorenses, tanto los oriundos de éste terruño, como también los hijos de padres sonorenses nacidos fuera del Estado. Y también quienes (siendo mexicanos, desde luego), tengan una residencia efectiva de dos años aquí en Sonora.
Todos quienes son sonorenses bajo esa definición aquí viven o de aquí son, aquí trabajan y aquí pagan sus impuestos; están sujetos a sus instituciones y autoridades; aquí votan; aquí están registrados en el catastro; aquí envían a sus hijos a la escuela; y de conformidad con el artículo 12 de nuestra carta magna aquí tomarían las armas y derramarían su sangre en defensa de la soberanía sonorense de ser necesario (y como ya ocurrió en el siglo XIX y a principios del XX).
Es excesiva la restricción, además, porque ni para el cargo de Gobernador se pide tal requisito de nacimiento, bastando con ser sonorense.
Por si fuera poco para el Concurso Estatal del Libro, del propio ISC, pueden participar escritoras y escritores sonorenses sin el requisito de nacimiento; y, además, el próximo 26 de Octubre en la apertura de la Feria del Libro de Hermosillo, será premiado el Dr. Francisco González Gaxiola “por su contribución en el análisis crítico de la literatura sonorense, formador de generaciones de académicos, escritores, docentes y promotores de lectura y la calidad de su obra literaria”, quien ha vivido siempre aquí en Sonora, pero que nació…en Mocorito, Sinaloa.
La convocatoria del ISC está respaldada por la UNISON; por el COLSON y por el INAH, a quienes Mujer y Poder exhortar -en virtud de que todavía hay tiempo-, para que den marcha atrás a ese inusual requisito. Se aplaude que se excluyan residentes de otros estados pero…¿de Sonora? Los que aquí residimos somos, todos, sonorenses.
SEM/nv