Isabel Ortega Morales
SemMéxico, Chilpancingo, Guerrero, 15 de agosto del 2022.- En voz del propio presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha estado en la montaña de Guerrero muchas veces. Una de ellas salía por la mañana a realizar reuniones a los municipios y regresaba invariablemente a comer en Tlapa, donde lo esperaban a la hora que llegara. Cenaba, platicaba con algún grupo político de la ciudad y se retiraba a su dormitorio. ¿Qué hacía en la montaña?
De las 68 lenguas originarias que se hablan en el país todavía, en la montaña se concentran tres, y una más en la costa chica, donde están asentados pueblos indígenas que tienen una particularidad entre ellos, además de su cultura, la resistencia. ¿AMLO, porqué en la montaña?
Un día, en el zócalo se instaló una mesa, unas sillas y una lona que pendía de los arbustos, la lona tenía una leyenda. Era una convocatoria a la resistencia civil. ¿La forma? Dejar de pagar impuestos al gobierno y dejar de pagar la luz.
Andrés Manuel López Obradora inició su segunda campaña política en Metlatónoc. Con una amplia presencia ciudadana. Parecía que la resistencia daba resultados y por fin arribaría quien se había comprometido a ser el salvador de la montaña, de los pueblos asentados en ese lugar y del impulso de su economía.
No ganó la elección. Tampoco ha ganado la montaña. Porque si revisamos los beneficios del gobierno federal en los cuatro, de seis años, que tiene un sexenio normal, este año inició el proyecto de Carreteras artesanales, y por la resistencia, presión, cabildeo casi en solitario del Edil de Tlapa, estará el TELETÓN instalando un CRIT en esta región y el gobierno del estado con Evelyn Salgado, y con la presencia del Senador Félix Salgado, retomó las caravanas médicas que antes, en los gobiernos de Peña Nieto, de Fox y de Calderón, recorrían las localidades prestando de manera directa servicios médicos, y que se habían suspendido cuatro años.
Uno de los grupos de resistencia más conocidos del estado es el de la UPOEG, Unión de Pueblos y Organizaciones Sociales del Estado de Guerrero, que inició en esta región, también la denuncia de los altos, altísimos y desproporcionados cobros que realiza la Comisión Federal de Electricidad a las y los habitantes de la región que suelen tener más de dos medidores para poder sortear los pagos.
¿Por qué la Comisión Federal de Electricidad no ha bajado los precios?, una de las explicaciones es que no es del gobierno sino una paraestatal. Tiene razón, pero sigue siendo una paraestatal del gobierno. ¿Por qué se les sigue cobrando tan elevados costos a las y los habitantes? Porque el gobierno quiere darle una mordida al envío de recursos que los paisanos y paisanas envían como producto de su esfuerzo a sus familiares que se quedan por acá y que dejan la crianza de hijos e hijas a la deriva, donde se sigue negociando la venta de niñas para el matrimonio, donde las mujeres deben dar hijos, hijas como parte de su ser mujer.
Esta es la montaña roja de Othón Salazar, donde inicio su gobierno el partido comunista pero no se ha visto un cambio cultural de los usos y costumbres donde la violencia, la muerte, sigue siendo el signo cotidiano.
Esta es la montaña de la resistencia de AMLO, y que, curiosamente, en su visita más reciente ya no se observó la larga hilera ciudadana de la espera para su recepción, saludo y compañía. Esta es la montaña que espera la transformación de políticas y políticos no en discurso ni en foto, sino en la realidad. O se convertirá en la montaña roja, y no por el comunismo.