Yo No Renuncio lanza la primera encuesta que medirá el costo de la conciliación que asumen las madres
La campaña busca reconocer el trabajo invisible y gratuito de los cuidados que recae tradicional y mayoritariamente en las mujeres
Redacción
SemMéxico/AmecoPress, Madrid, España, 12 de febrero, 2022. — La asociación Yo No Renuncio, del Club de Malasmadres, lanza la primera encuesta que medirá “El coste de conciliación”, en términos económicos, emocionales y sociales. La encuesta valorará todo el trabajo del cuidado que mayoritariamente sigue recayendo en las mujeres. El objetivo de la organización es “hacer visible lo invisible y “luchar para que se reconozca social y económicamente la maternidad”.
Este coste o costo aparece debido a la carencia de medidas de conciliación que soportan las mujeres españolas, y se evidencia en tres aspectos: el coste económico y laboral, ya que las mujeres ralentizan, frenan o paralizan su trayectoria profesional y con ello su salario, el coste social, la mujer se vuelve invisible cuando se convierte en madre, y por último el coste personal y emocional, debido a la carga mental multiplica las situaciones de estrés y ansiedad.
Bajo el lema “conciliar no es gratis” la encuesta calcula el coste de todos los trabajos necesarios para la supervivencia diaria de una familia. Además de la encuesta, la asociación ha publicado un vídeo sobre esta campaña en el que muestra esta realidad. “El coste de la conciliación es una campaña de concienciación con el objetivo de reconocer y visibilizar el trabajo invisible y gratuito de los cuidados que recae tradicional y mayoritariamente en las mujeres. Ese trabajo tiene un coste emocional, laboral y social para nosotras. Por eso hemos creado una encuesta que analice cómo viven esta situación las mujeres, principales responsables de estas tareas, y cuantificar el tiempo que dedicamos a este trabajo no pagado”, asegura Laura Baena, presidenta de la Asociación «Yo No Renuncio».
Hablar de quién lleva a cabo las tareas doméstico-familiares y a cambio de qué lo hace, debe ser igual de importante que hablar de la igualdad de género en las empresas.
El estudio “Somos Equipo” (Yo No Renuncio, 2017) detectó que la corresponsabilidad está lejos de ser una realidad en España y que las mujeres son las principales responsables de las tareas doméstico-familiares, con más intensidad desde que se convierten en madres. La entrega al cuidado de su familia, hace que la mujer asuma las obligaciones del hogar como propias y olvide que se trata de un trabajo.
Además de la ausencia de medidas de conciliación en España, en los últimos dos años, “si la pandemia ha dejado claro algo, es que la conciliación no existe”, apunta Laura Baena. “Se ha puesto de manifiesto, más que nunca, la falta de estructuras de apoyo a las familias y la carencia de medidas efectivas de conciliación, convirtiéndose en un sálvese quien pueda. En un país donde la conciliación no existe, donde conciliar tiene nombre de abuelos y abuelas y colegios, el coste es elevado. Conciliamos como podemos y a costa del esfuerzo personal, laboral y emocional de las familias”, añade la portavoz.
En los estudios de la Asociación Yo No Renuncio se han recogido datos como que el 22% de las mujeres que han tenido que cuidar a un hijo o hija durante la
cuarentena preventiva, lo han hecho renunciando a todo o parte de su trabajo
(cogiendo vacaciones, reduciendo la jornada o excedencia). También que según Somos Equipo seis de cada diez mujeres renuncian a su trayectoria profesional al convertirse en madres (reduciendo su jornada, cogiendo excedencias o abandonando el mercado laboral). En otro de sus estudios, se concluyó que independientemente de quien aporta más ingresos al hogar, es la mujer la principal
responsable de las tareas doméstico- familiares. El 45% de las mujeres son las
responsables principales de las tareas domésticas y de cuidado, frente al 9% de sus
parejas, aunque aporten los mismos ingresos al hogar.
Foto: Yo No Renuncio