- Riesgoso hablar de disminución de feminicidios cuando hay cifra negra: RNR.
Micaela Márquez
SemMéxico, Ciudad de México, 9 de mayo del 2023.- Con los datos oficiales que confirman que la violencia contra las mujeres en este país va en aumento la Red Nacional de Refugios (RNR) refirió que es ineludible que los gobiernos reconozcan que no dan prioridad a la entrega de los presupuestos con perspectiva de género y enfoque de derechos humanos y los han obstaculizado con procesos burocráticos, como lo han hecho los últimos dos años con el Programa de Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia de Género, sus hijas e hijos.
Los organismos internacionales hacen recomendaciones al Estado mexicano para que con claridad mantenga el debido cumplimiento de asignar el Presupuesto de Egresos de la Federación en tiempo y forma, sin reducciones ni demoras burocratizadas que ocasionan retrasos en los procesos.
La RNR amplifica las voces y exigencias de las mujeres víctimas de violencia y le apuesta a un diálogo horizontal en una democracia real entre víctimas de violencia, la sociedad civil organizada, academia, legisladoras y legisladores, medios de comunicación en un objetivo común que es la eliminación de las violencias contra las mujeres, justicia integral, la igualdad y presupuestos garantes para que se materialicen los cambios más allá de un periodo de gobierno.
De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSNSP) en el primer trimestre del 2023, los delitos contra las mujeres siguieron al alza entre ellos: la violencia de género aumentó, 47.5 %, la violencia familiar 7.6 % y la violación un 10 por ciento en comparación al mismo periodo del año pasado. Asimismo, el informe menciona que el feminicidio bajó 9 por ciento, mientras que el homicidio doloso y culposo aumentaron 8.7 y 14.8 %, respectivamente.
La Red Nacional de Refugios advierte que hablar de una disminución en los feminicidios, es riesgoso, cuando sabemos que en México no sólo hay una cifra negra de más del 90 por ciento sino que hay serias deficiencias para tipificar correctamente los asesinatos de mujeres como feminicidios.
En este contexto, la RNR enfatiza la permanencia de las organizaciones de la Sociedad Civil para garantizar los derechos humanos a mujeres y sus familias a la protección, asistencia integral gratuita para vivir sin violencias con dignidad y bienestar, sobre todo prevenir feminicidios y discapacidades por las violencias machistas.
También destaca que pese a los avances legislativos a favor de las mujeres estos no se ven reflejados en los programas gubernamentales ni en los procesos de acompañamiento a las mujeres, los cuales siguen perpetuando impunidad y la repetición de prácticas machistas y sin enfoque de igualdad y de derechos humanos.
La ausencia de abordaje con perspectiva de género, derechos humanos e igualdad revictimiza a las mujeres y se suma a la falta de credibilidad y confianza que tienen las mujeres en las autoridades, siendo uno de los obstáculos para que en México se pueda garantizar el acceso a la justicia integral. Como ejemplo señala los testimonios de las más de 5 mil mujeres a las que se les ha acompañado en el primer trimestre del 2023, registran que el 32 por ciento de las mujeres en el refugio primero acudieron a otras instituciones sin recibir la atención requerida, 2 por ciento solicitó apoyo a algún Instituto de las Mujeres, el 4 por ciento a un Centro de Justicia, el 2 por ciento a una Luna, el 4 a una instancia policial, el 6 por ciento a un Centro de Atención a la violencia, etc.
La RNR amplifica las voces y exigencias de las mujeres víctimas de violencia y le apuesta a un diálogo horizontal en una democracia real entre víctimas de violencia, la sociedad civil organizada, academia, legisladoras y legisladores, medios de comunicación en un objetivo común que es la eliminación de las violencias contra las mujeres, justicia integral, la igualdad y presupuestos garantes para que se materialicen los cambios más allá de un periodo de gobierno.
Para promover este diálogo y amplificar las voces de exigencia en septiembre del 2022, la Red Nacional de Refugios lanzó la “Marea Violeta” como un movimiento nacional a través de tertulias musicales, merkaditas feministas y terapias psicológica feminista, y la aplicación móvil Sendero Violeta para generar comunidad en situaciones de violencia.
Cobertura de la Red Nacional de Refugios
Los Refugios y Centros de Atención Externa son espacios de protección, restitución de derechos y prevención de feminicidios, que, pese a los limitados presupuestos, carentes de perspectiva de género, de progresividad, de financiamiento efectivo por 12 meses y la no entrega oportuna a las que se siguen enfrentando, persisten y se han mantenido operando ininterrumpidamente creando diversas estrategias y gracias al compromiso del personal que también ha resistido a las violencias institucionales.
En el 2022 se atendieron de forma integral a 35,285 mujeres niñas y niños. Este año en los primeros tres meses de este año se han atendido 5,568 mujeres, niñas y niños, con un aumento del 4 por ciento en comparación al mismo periodo del año anterior.
El 25 por ciento de las mujeres que se comunicaron a la RNR durante el mes de marzo 2023, tienen hijas e hijos, de los cuales el 44 por ciento también son víctimas de violencias física y emocional.
En 2022 se registró un incremento del 12 por ciento en los ingresos a los Refugios de la RNR en comparación al mismo periodo del año anterior. Asimismo, durante el mes de diciembre hubo un aumento de 36 por ciento en las atenciones brindadas en los Centros de Atención Externa de Refugios.
Durante 2022, reportaron 449 mujeres atendidas por la RNR haber sido víctimas de violencia sexual y 141 mujeres vivieron intentos de feminicidio.
De acuerdo a los reportes del 2022 y 2023 las mujeres son objeto de violencias física, psicológica, económica, sexual y patrimonial. Los hombres agresores eran parejas actuales y esposos. En la violencia a los niños y niñas el agresor era el mismo que el de la madre. Las mujeres con adiciones eran a consecuencia de las violencias vividas siendo obligadas por el agresor al consumo, las principales adicciones son al tabaco, alcohol y a la marihuana.
Sobre el perfil de los agresores es importante señalar que el 33 por ciento tienen antecedentes penales; 17 tienen vínculos relacionados con el narcotráfico, el 74 tiene alguna adicción, principalmente al tabaco, alcohol, cocaína, marihuana y solventes. Asimismo, el 70 por ciento de los agresores tienen vínculos militares o políticos, además de usar armas, lo cual exacerba el nivel de riesgo e impunidad al que se enfrentan las mujeres al intentar acceder a la justicia integral.
SEM/MG
