Jen Pawol derriba una barrera de género al ser la primera umpire en las Grandes Ligas
Comenzó su trayectoria en MLB siendo juez en la línea de la primera base; no tuvo ningún problema en solventar el encuentro entre Marlins y Braves
Agencias
SemMéxico, Cd. de México, 10 de agosto, 2025.- Jen Pawol hizo historia este fin de semana como la primera mujer en ser umpire (árbitro) en un juego de temporada regular en las Grandes Ligas de béisbol (MLB) en Estados Unidos.
Pawol trabajará en tres partidos durante la serie de este fin de semana en la serie entre los Marlins y los Bravos en Atlanta, incluyendo ambos encuentros de la doble-cartelera del sábado (arbitrando en bases) y el final de la serie el domingo, cuando estará detrás del plato (árbitro general).
La umpire Jen Pawol, de 48 años y nacida en Nueva Jersey, dirigió en los juegos de entrenamiento de primavera en el 2024 y este año.
Este anuncio hecho por la MLB se produce 28 años después de que se rompiera la barrera de género para los árbitros en la NBA, diez años después de sucediera lo mismo en la NFL y tres años después de que la Copa Mundial de fútbol masculino empleara a una árbitra.
Pawol ha ascendido de forma constante en los rangos del arbitraje desde que comenzó su carrera como novata en el año 2016. Luego alcanzó la división Triple-A en el 2023 y se convirtió en la primera mujer en trabajar en la gran final de ese nivel.

Jen Pawol. Foto: Reuters
En el 2024, Jen Pawol se convirtió en la primera umpire femenina en un partido de pretemporada de la Grandes Ligas desde que Ria Cortesio lo hiciera en el año 2007.
Jen Pawol hizo lo que más disfruta: estar en un diamante de beisbol observando jugadas para hacer cumplir el reglamento como un umpire… Pero en esta ocasión, lo hizo llevando sobre sí los reflectores de la historia al convertirse en la primera mujer que hace esa función en un partido de Grandes Ligas que ganó Atlanta 7-1 a Miami.
Desde la línea de la primera base, Pawol observó cada jugada del primero de los juegos de una doble cartelera entre Miami y Atlanta (para el segundo fue la encargada de las jugadas en tercera base). Sus primeros outs como un umpire de Grandes Ligas fueron un par de ponches del pitcher Hurston Waldrep. Concluyó el primero de sus innings en la Gran Carpa sin necesidad de hacer llamados.
El esperado debut de Pawol resultó suave como la seda; desde las gradas hubo muestras de apoyo por este momento histórico en su vida y en la lucha de las mujeres por ser consideradas para hacer funciones que habían estado reservadas únicamente para varones. Grandes Ligas se sumó al listado de hitos en los que la paridad de género se ha consumado en una función como la de impartir justicia a partir de la interpretación del reglamento.


Jen Pawol. Foto: Reuters
Jen Pawol hizo lo que más disfruta: estar en un diamante de beisbol observando jugadas para hacer cumplir el reglamento como un umpire… Pero en esta ocasión, lo hizo llevando sobre sí los reflectores de la historia al convertirse en la primera mujer que hace esa función en un partido de Grandes Ligas que ganó Atlanta 7-1 a Miami.
Desde la línea de la primera base, Pawol observó cada jugada del primero de los juegos de una doble cartelera entre Miami y Atlanta (para el segundo fue la encargada de las jugadas en tercera base). Sus primeros outs como un umpire de Grandes Ligas fueron un par de ponches del pitcher Hurston Waldrep. Concluyó el primero de sus innings en la Carpa sin necesidad de hacer llamados.

La primera prueba real para Pawol llegó en la tercera entrada, cuando cantó quieto a Sean Muprhy en una jugada cerrada. Las repeticiones indicaron que Murphy podría haber sido out, pero el mánager de los Marlins, Clayton McCullough, no cuestionó la decisión.
Minutos después, en la entrada, cantó con entusiasmo el out a Xavier Edwards (Miami) cuando conectó un roletazo para doble play. Pawol apretó el puño y levantó la pierna cuando cantó out a Edwards en la primera base.
Lo que ella dice
Ser umpire es para mí algo fundamental; está en mi ADN. Ha sido un viaje largo y duro hasta la cima. Pero, simplemente amo la camaradería con mi equipo, con los demás umpires. Amo viajar. Amo hacer ejercicio.
Hay tantas similitudes entre ser un atleta y un umpire, y nunca tengo que dejar el campo cuando estoy trabajando”, fueron algunos de los dichos de Pawol previo al juego que marcaría un antes y después para el beisbol de las Grandes Ligas.