Que las mujeres ocupen espacios de poder no asegura que defenderán los derechos de las mujeres
Elda Montiel
SemMéxico. Ciudad de México, 21 de octubre 2023.- Las mujeres en México consiguieron primero el derecho al voto municipal, en 1947, lo que resulta contradictorio porque actualmente sólo el 15 por ciento de los 2 mil 462 municipios estén encabezados por mujeres.
Ello sin considerar que en el sendero de la lucha por el voto, comenzó hace casi 200 años.
Para la periodista, profesora e investigadora Rosa María Valles Ruíz, lo importante para las mujeres en la participación política es tener una tribuna, por lo que es importante pertenecer a una organización, colectiva e incluso partidos políticos para que se pueda incidir en políticas públicas.
También señaló entre los retos esta la misoginia feminista, mujeres que estorban a otras mujeres, no basta que una mujer llegue a los espacios de poder, esto no implica que representen los derechos de las mujeres, expresó.
Lo dijo al participar en el ciclo de conferencias, que organizó el Museo de la Mujer, en el marco del 70 aniversario del Sufragio femenino en México, en el ciclo de conferencias “La lucha por la ciudadanía”.
Habló de “La conquista del sufragio femenino: camino arduo y extenuante”, se refirió a que fue una lucha histórica la del 17 de octubre de 1953, cuando se reforma el Artículo 34 constitucional que otorga el voto universal a las mujeres. Ese año, en diciembre, las mujeres votan por primera vez en Baja California, cuando pasó de territorio a Estado, dato que rescató de la hemeroteca y entonces se eligió a la primera diputada federal, Aurora Jiménez de Palacios.
En 1955 es la primera legislatura en la que no sólo votan las mujeres sino son votadas. Y resultaron 5 diputadas federales. María Lavalle Urbina y Alicia Arellano Tapia fueron las primeras senadoras, en 1966, 11 años después de la primera vez que las mujeres votaron en todo el país.
En el recuento histórico relató como las mujeres fueron reprimidas violentamente, algunas encarceladas frecuentemente y fusiladas. Como fueron obstaculizadas y ante su tenacidad al último momento se les regateaba el reconocimiento a la participación política.
La investigadora refirió como los inicios por la lucha del sufragio se remontan desde hace 200 años, en 1824 cuando se da el primer intento por un grupo de mujeres de Zacatecas que solicitan al gobierno ser consideradas como ciudadanas.
Posteriormente, en 1856, cuando 81 mujeres se dirigieron al Congreso Constituyente, el que elaboró la Constitución de 1857, demandando su derecho a votar, sin resultados.
Rosa María Valles Ruíz precisó que con el fenómeno social del feminismo en ascenso reivindicó el derecho a la educación y a ingresar al mercado laboral, dese revistas como “Violetas del Anáhuac”, “Álbum de la Mujer” y “Mujer Mexicana”, editadas en el siglo XIX.
Con la revista “Mujer Moderna”, en 1918, es cuando las mujeres demandan de manera contundente su participación política, es cuando las mujeres de clase media reivindicaron los derechos políticos y sociales, de su género, indicó.
A las mujeres se les reprime violentamente por pedir el voto
Destacó en su participación que hubo un hecho muy importante y poco estudiado la represión violenta, en la que hubo 9 muertos, para las mil mujeres que se juntaron en 1911 organizadas en “Amigas del Pueblo” y pidieron el voto al presidente interino Francisco León de la Barra. Argumentaron que la Constitución de 1857 no decía de manera explícita que las mujeres no podían votar.
Detalló que hubo muchas mujeres importantes en la lucha del sufragio, fueron maderistas, zapatistas, carrancistas, magonistas.
Entre las que mencionó a Juana Belén Gutiérrez de Mendoza, quién fue encarcelada varias veces por Porfirio Díaz, y Elisa Acuña de Rosete, quienes hizo un periódico “La Guillotina”, ejemplares que no están en México sino en una biblioteca de la Universidad de Texas, en Estados Unidos. Las dos fueron muy valoradas por los hermanos Flores Magón y posteriormente rechazadas porque se rumoraba que eran pareja.
Otras magonistas fueron Silvina Rembao, Rosaura Gortari y Margarita Ortega quienes enfrentaron a los huertistas junto con Natividad Cortés, quien murió al igual que Rosaura porque no soportó el paso por el desierto.
Margarita Ortega huye hacia Baja California y cerca de Mexicali fue apresada encarcelada y torturada por huertistas. Murió fusilada el 24 de noviembre de 1913. Todas estas historias revelan la fuerza de estas mujeres, dijo la conferencista.
Las maderistas, Teresa Arteaga, María Luisa Urbina, Joaquina Negrete, María Aguilar, Adela Treviño, Carmen Serdán la más famosa, Guadalupe Rosa Narváez.
De las zapatistas una famosa fue Dolores Jiménez y Muro colaboradora en el “Diario del Hogar”, militante y se considera, aunque, dijo, no se puede confirmar, que apoyó la redacción del Plan de Ayala. Esto porque las mujeres estaban muy acotadas, no se podían mencionar.
Hermila Galindo lucha por la participación política de las mujeres
Destacó, especialmente, la participación de Hermila Galindo Acosta,feminista, escritora y la primera embajadora en el gobierno de Venustiano Carranza. Fundó “Mujer Moderna” la primera revista feminista en el siglo XX, escribía en la portada e impulsó, el reconocimiento al voto femenino.
De hecho, fue la primera candidata a diputada federal en 1917, pero con el argumento de que la constitución no especificaba que las mujeres podían participar, gana las elecciones, pero no la aceptaron. Perdió ante Ernesto Aguirre Colorado, a quien lo vigila y lo acusa de ser diputado del silencio. Se convierte en la primera censora legislativa. Mismas elecciones en las que Venustiano Carranza ya es electo presidente de la República
Describió a Hermila Galindo como una mujer de pensamiento avanzado que en los dos primeros congresos feministas en Yucatán, en 1916, provocó un gran escándalo al exponer que las mujeres tenían deseos e instinto sexual de acuerdo a pensadores como Buda y Aristóteles, lo que le acarreó fuertes críticas. A lo que ella respondió que eran ignorantes.
Tras largas discusiones en el Primero y Segundo Congreso Feminista, celebrados en Yucatán, las feministas acordaron iniciar en el ámbito municipal con el voto para mujeres mayores de 21 años “siempre que supieran leer y escribir”. Hermila pide al Congreso voto para las mujeres, pero restringido, sólo para las que supieran leer y escribir, ante el Constituyente de 1917. Le fue negado.
La línea editorial de la Revista “La Mujer Moderna” tenía dos vertientes; por un lado, la defensa del Constitucionalismo enarbolado por Venustiano Carranza y la reivindicación de los derechos de las mujeres.
Ella creó Consejos Feministas en varias entidades y fue la autora de la idea de crear el Consejo Feminista Mexicano establecido posteriormente en 1925. Estableció relaciones con 59 líderes de América Latina, Europa y Asia.
Se nutrió de pensamientos de John Stuart Mill, Augusto Bebel, Alejandra Kollontai, Clara Zetkin, y Flora Tristán. Se afilió a varios clubes, fue oradora en el club Abraham González conoce a Venustiano Carranza y la nombra su secretaria particular.
Hablaba de tres emancipaciones, esa palabra ya no la usamos, pero ella dice que las mujeres se tenían que despojar de los prejuicios de la sociedad, de la tutoría de los hombres y del clero al que calificó como más oprobioso y cruel porque incidía en las conciencias de las mujeres.
Venustiano Carranza la envía como conferencista, fue la primera diplomática sin nombramiento oficial así lo registra la doctora Patricia Galeana en una obra sobre las diplomáticas mexicanas.
En septiembre de 1919, Hermila Galindo escribe el libro “La Doctrina Carranza y el acercamiento indolatino” donde se exponen las bases de la política internacional de México.
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El 21 de mayo de 1920, Carranza, es asesinato en Tlaxcaloltongo, Puebla. Después es muy poco lo que se sabe de Hermila Galindo, se sabe que se casó y seguramente estuvo cerca de las feministas que andaban tras el sufragio, considero Rosa María Valles.
En Chiapas en 1925 se reconocía el derecho a votar y ser votada a las mujeres
La investigadora destaca que el decreto 8 de Chiapas del 1925, emitido por la XXX legislatura local, se señalaba que “desaparecía para siempre la infamante idea de épocas antiguas y sociedades salvajes de que la mujer era un ser similar a los muebles con subordinación deprimente al hombre … que en esa entidad se reconocía a la mujer de 18 años en adelante los mismos derechos políticos del hombre y en consecuencia, tenía el derecho de votar y ser votada por los puestos públicos de elección popular, cualesquiera que estos fueran”.
Las organizaciones importantes para hacer realidad el sufragio feminista fue: En 1923 el Consejo Feminista Mexicano, lo establecen Elena Torres y Refugio Martínez.
La Unión de Mujeres Americanas en 1932 con el entusiasmo de Margarita Robles de Mendoza, conocida por su tenacidad.
El Frente Único Pro-Derechos de la Mujer nació en 1935, es dijo la investigadora, la expresión del movimiento feminista mexicano más relevante en la primera mitad del Siglo XX.
A pesar de que el presidente Lázaro Cárdenas propuso y se aprobó el voto universal el 26 de agosto de 1937, presentó la iniciativa en la 37 Legislatura y si se reformó el Articulo 34, las mujeres ya se sentían ciudadanas, la mayoría de los estados lo aprobaron pero no se realizó el cómputo, no se promulgó.
El 27 de julio de 1945 Miguel Alemán hace la promesa del voto en el ámbito municipal. El 24 de diciembre de 1946 la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa correspondiente con una adición al artículo 115 constitucional en las elecciones municipales, decretada en 1947.
Hasta que llegamos al 17 de octubre de 1953 cuando se logra el voto universal para las mujeres.
