- A nueve años del surgimiento MPJyD
- La 4T no ha sido capaz de responder ante esta crisis sanitaria.
Estrella Pedroza
SemMéxico. Cuernavaca, Morelos. 28 de marzo 2020.- La aparición mundial de la pandemia Covid-19 ha agudizado la emergencia nacional y una tragedia humanitaria que se vive en México desde hace años, “ha paralizado y han invisibilizado a las víctimas que ha cobrado el crimen organizado desde que inició la emergencia sanitaria e invadió el espacio público a través de los medios de comunicación”, sostuvo, Javier Sicilia, escritor, al cumplirse nueve años del surgimiento del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJyD).
Lo anterior, como parte de un pronunciamiento que dirigió al país desde el Memorial de Victimas, que fue instalado en la entrada principal de Palacio de Gobierno- sede oficial del Poder Ejecutivo de Morelos- para conmemorar el movimiento que surgió tras el asesinato de siete personas, entre ellas Juan Francisco Sicilia, hijo del también poeta y activista.
El MPJyD en 2011 logró unificar y visibilizar el dolor de miles de víctimas y enfrentarse al Estado para exigir paz y justicia para las miles de víctimas de la guerra que emprendió Felipe Calderón Hinojosa, entonces Presidente del país.
“Vivimos desde hace años una emergencia nacional y una tragedia humanitaria, que recientemente se han agudizado con la aparición mundial del Coronavirus o Covid-19, una forma de violencia que enferma, mata, nos segrega y a diferencia de la que nos ha acompañado durante estos últimos años, y que ha cobrado la vida de cerca de 300 mil personas y la desaparición de más de 61 mil, nadie podía evitar”, dijo, el líder moral del MPJyD acompañado de activistas y familiares de víctimas.
“Ella (la pandemia), es un horror, y en la forma en que nos ha paralizado ocupando nuestra atención, nos ha dado una profunda enseñanza: ha detenido (…) Pero también nos ha hecho olvidar el horror de otras profundas y graves violencias que estaban allí antes de la llegada del Covid-19…” agregó.
Y reprochó que la atención que desde los medios y redes sociales le ponen al COVID-19 “se ha perdido de vista a las víctimas de la violencia humana –que sólo en el primer año del gobierno de la 4T se contabilizaron en cerca de 40 mil asesinatos y decenas de desapariciones”.
Y cuestionó “¿Cuántas muertes y desapariciones (…) han cobrado el crimen organizado, la negligencia, el desprecio y las redes de complicidad de la clase política desde que la pandemia comenzó a ocupar el espacio público a través de los medios?”.
A ese olvido, preocupante, hay que agregar la manera en que la 4T se ha posicionado frente al país. Al haber roto, casi desde sus inicios, los vínculos inherentes que tenía con muchos movimientos sociales –como el zapatismo y los pueblos indígenas, los movimientos de víctimas y los feministas, con organizaciones independientes de la sociedad civil, con instituciones autónomas dentro del aparato del Estado–, y el hecho, incluso, de haberlos confrontado, la ha ido arrinconando en una pobreza ideológica alarmante, que ha debilitado a la Presidencia de la República.
Destacó que hasta ahora el gobierno federal y la 4T ha sido “incapaz de crear una sólida cohesión social para fortalecer al país, más aún frente a una emergencia de naturaleza internacional como la que ha creado el Covid-19”
Y subrayó que si algo han enseñado los movimientos sociales como Movimiento Zapatista MPJyD y la emergencia del Covid-19 “es que la fuerza de respuesta y de transformación para responder a la crisis no están ni en el Estado ni en la lógica del entorno económico que conocemos, se encuentran, por el contrario, en la capacidad humana y vital de la gente para organizarse de manera solidaria y construir juntas y juntos un mundo a la medida de lo humano”.
Para la conmemoración del surgimiento del MPJD, se tenían programadas una serie de actividades públicas y diálogos en relación con ese proyecto común que fueron canceladas por la emergencia del Covid-19.