Natalia Vidales de Bitterlin*
SemMéxico, Baja California, 25 de enero, 2025.- No nos parece nada bien que la actitud correcta de la presidenta Claudia Sheinbaum, de sus funcionarios y sus simpatizantes ante el discurso de investidura de Donald Trump deba de ser -como lo fue- de confrontación e incluso de burla.
Actuar así no traerá ningún beneficio ni al gobierno ni a los ciudadanos; por el contrario, aumentará la brecha de una relación que no se avizora propositiva ni halagüeña entre los dos mandatarios, vecinos y con relaciones comerciales de provecho mutuo sí, pero sobre todo al nuestro… dado el contraste entre ambas economías.
Iniciar así una relación que debería ser de cordialidad, no es algo que deba aplaudirse ni aceptarse por los mexicanos. El responder con mofa a las propuestas del mandatario Trump no abona al diálogo ni a la conciliación que debe prevalecer entre dos países vecinos.
Las medidas anunciadas -y firmadas ya- por el presidente Trump van dirigidas, por supuesto, a la búsqueda del bien mayor del país que gobierna. Como debe ser. Ya quisiéramos en lo personal, escuchar algo similar de parte de Sheinbaum y de los presidentes que nos han antecedido. ¡Hacer grande a México! sin duda incluiría acciones polémicas, difíciles, dolorosas, pero el bien superior sería, claro, el bienestar de los mexicanos… por sobre otros intereses populistas y de concentración del poder.
En referencia al tema migratorio, nos duele, por supuesto, la situación por la que están atravesando miles de familias que han quedado literalmente varadas en la frontera norte, pero consideramos que este problema -tan grave y complejo — debe atenderse con mayor atención para evitar los enormes riesgos de la migración indocumentada en ambos lados de la frontera.
Las declaraciones de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aunque suenan muy humanas, no son las adecuadas ya que pretender ¨abrir los brazos¨ a todos los migrantes es algo que traerá caos, conflictos y muchos problemas al gobierno y a los ciudadanos….sobre todo a quienes residimos en la frontera con ese país.
En este punto es imposible no recordar cuando AMLO aseguró que el crecimiento económico en nuestro país haría que millones de paisanos regresaran a vivir y a trabajar en México y que solo irían de paseo o a conocer a los Estados Unidos…en una más de sus declaraciones demagógicas.
Mejor actitud y declaración sería una propuesta al mismísimo presidente Trump. Una propuesta que beneficie a ambos países como lo pudiera ser los permisos temporales de trabajo en la unión americana y el compromiso de impedir el internamiento de ciudadanos por la frontera sur.
Eso, en el tema migratorio. Pero en el de seguridad, el decreto de Trump de designar a los cárteles y otros grupos criminales como organizaciones terroristas debe recibirse con beneplácito porque unir fuerzas para acabar con ese cáncer que se expande a todo lo ancho de nuestro querido país debe ser más que bienvenido…en lugar de rechazado, como ha sucedido.
Aprovechemos la oportunidad de este cambio de gobierno en Norteamérica para sacar beneficio para México. Utilicen, por Dios, la diplomacia como instrumento para fortalecer una relación de amistad entre las dos naciones vecinas. Eso sí sería dar un paso adelante.
*Periodista con más de 40 años de ejercicio profesional. Activista social, fundadora y directora de la revista Mujer y Poder. Comentarios: whats 6621441440. www.mujerypoder.com.mx