- IPN da una disculpa pública a la familia de Mary Chuy Jaimés Zamudio a seis años de su feminicidio
- La institución reconoce sus errores. Dará su título como ingeniera postmortem
Lorena Vaniezcot
SemMéxico, Cd. de México, 24 de enero, 2022.- Nos matan porque no nos creen, porque creen que exageramos, porque no importa a cuántas nombremos. Cómo nos van a creer si el hombre más importante, poderosos y que cuenta con el mayor nivel de popularidad en la historia de los Presidentes de México, no nos cree, dijo Yesenia Zamudio Solórzano durante la ceremonia de “disculpa pública” ofrecida hoy por el Instituto Politécnico Nacional (IPN) a seis años del feminicidio de su hija, María de Jesús Jaimés Zamudio.
El Presidente no le creyó a las mujeres abusadas de Guerrero y quería a Félix Salgado Macedonio como gobernador; el Presidente no le cree a las estudiantes y maestras del ITAM y quiere a Pedro Salmerón de embajador en Panamá; el Presidente no le creyó a la periodista Lourdes Maldonado López, no la protegió y ayer fue asesinada, añadió la también activista del Colectivo Ni una Menos.
Si el Presidente no nos cree, es evidente que, en los trabajos, en las escuelas, en las calles no nos crean, dijo y reprochó que en el IPN, como la mayoría de las instituciones y universidades en el país, no son ni han logrado ser espacios seguros ni nidos de igualdad, dijo ante el director general de la institución, Arturo Reyes Sandoval; la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), María del Rosario Piedra Ibarra, y el abogado Federico Anaya Gallardo.
Cuestionó que a pesar de que más mujeres ocupan cargos públicos, como una Ombudsperson, una ex Secretaria de Gobernación, una Jefa de Gobierno y una Fiscala en el gobierno de la ciudad de México “nuestra realidad no cambia, nos siguen matando”, dijo la madre de Mary Chuy, quien estaría próxima a cumplir 25 años y quizá fuera ingeniera petrolera, apuntó.
Antes, el abogado general del IPN, Federico Anaya Gallardo, recordó a Mary Chuy como alumna de la carrera de Ingeniería Topográfica y Fotogrametría en la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura, Unidad Ticomán, donde era becaria, que sabía que la violencia era uno de los problemas más graves de nuestra sociedad, pero también fue víctima de ello.
Al momento de ofrecer la disculpa pública hizo un recuento de las acciones realizadas por el IPN. Cuatro años antes del feminicidio de Mary Chuy Jaimés Zamudio se formó la Unidad Politécnica de Gestión con Perspectiva de Género, pero esa tragedia demostró a la comunidad politécnica, la necesidad de atender mejor la problemática.
En 2019 se estableció el Protocolo para la Prevención, Detención, Protección y Sanción de la Violencia de Género, y reconoció que esos instrumentos eran ineficaces al momento del feminicidio de Mary Chuy.
Reconoció las fallas de la institución, nuestras respuestas a los agentes del Ministerio Público, que investigaron, pudieron ser más claras y proactivas, fue ineficaz el seguimiento interno de las personas de interés señaladas en las investigaciones, defectos que también justifican la disculpa.
Anaya Gallardo dijo que la disculpa pública estaría vacía si no se tienen acciones de cambio, por eso es que desde 2021, se da seguimiento más profundo a los casos de violencia de género y prestamos seriamente nuestro apoyo a las víctimas. Recordó que la cultura patriarcal impera en la sociedad y en la casa de estudios.
“El IPN agradece, si es que se puede agradecer el dolor que ustedes han tenido, a la familia, a su madre Yesenia Zamudio Solórzano, por la infatigable lucha por lograr justicia, por eso mismo no solo ofrecemos una disculpa y nuestra cooperación para que el recuerdo de nuestra alumna asegure la no repetición y satisfacción que tienen ustedes derecho, tal vez sea una satisfacción imposible per estamos obligados a intentarlo.
Anunció que como parte de las acciones del IPN se dará el título post-mortem “que conmemore su esfuerzo escolar y sus estudios interrumpidos; una cátedra que trabajé, investigue y discuta la violencia de género, estas acciones no satisfacen a ustedes, pero juntos podemos honrar la memoria de Mary Chuy”.
Durante el acto se guardó un minuto de silencio por María de Jesús, en tanto, transmitían un video en su memoria.
Por su parte, María del Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la CNDH, refrendó la solidaridad y compromiso en el proceso de acompañamiento de la reparación del daño, la búsqueda de verdad y justicia.
Dijo que la disculpa pública ofrecida por el IPN reconoce el esfuerzo de su madre, Yesenia Zamudio, y la memoria de María de Jesús, ejemplar estudiante, dedicada hija, hermana.
Con la disculpa se reconocen los hechos y el IPN asume su responsabilidad como parte de esas violaciones a los derechos humanos, es importante hacer énfasis que mediante este acto se visibiliza y da voz a las víctimas para que sean escuchadas y se tomen encuentra en el proceso de reparación integral del daño y lo que resta es que se haga justicia.
Antes de finalizar la ceremonia, Maira González Ángeles, de la organización Ni una Menos y Uniendo Esperanzas del Estado de México, exhortó a las autoridades a asumir su responsabilidad como instituciones. Dijo que las víctimas y sus familias se enfrentan a estructuras omisas e indiferentes, un estado fallido, del cual no escapan las instituciones de educación.
“El IPN debería ser un lugar seguro. Nos preocupa que el IPN, labore un feminicida. Es una irresponsabilidad de quienes representan a esta institución que no hayan puesto manos y ojos a esa persona, se hicieron mudos y ciegos” y eso nos llena de impotencia por la impunidad que genera.
En el acto estuvieron presentes el padre de Mary Chuy, Honorio Jaimés López, así como Juan Manuel Cantú Vásquez, Secretario General del IPN, y María del Rosario Trejo García, titular de la Unidad Politécnica de Gestión con Perspectiva de Género.
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