Libertad Para el Aborto en México
Natalia Vidales Rodríguez
SemMéxico. Sonora. 7 de agosto de 2019.- La Suprema Corte de Justicia de la Naciónavaló el día de ayer el aborto legal en caso de violación, tanto para niñas como para mujeres adultas.
La disposición es para todo el país y los hospitales públicos y privados tendrán la obligación de atender a quien lo solicite, sin necesidad de denuncia ni ningún trámite más que el manifestar el deseo de hacerlo.
Lo anterior ha generado controversia y polémica, como lo ha sido desde que se ha venido dando la despenalización del aborto en los distintos estados del país –a los que la ley les da la autoridad de aprobarla o no, por la independencia legislativa que tienen.
Al respecto, nos manifestamos con lo que consideramos de gran sencillez y sentido común: lo legal no siempre es moral, y viceversa.
Podrán redactarse leyes que tal o cual grupo rechace, incluso leyes injustas, pero una vez aprobadas por los legisladores…deben cumplirse. Pero en este caso… hay libertad de hacerlo o no; se da a los padres la opción de decidir por las hijas, no como obligación sino como alternativa para un hecho tan atroz como lo es una violación.
Entonces, junto con la aprobación de esta ley, las autoridades deben dar herramientas a los padres para decidir no con las emociones sino con la razón, apoyarlos en sus dudas y que con un real entendimiento hagan su decisión. Y los grupos pro-aborto, apoyar también con información adecuada para sensibilizar a los padres sobre la decisión de un aborto para su hija menor de edad que fue ultrajada. No es muy difícil suponer que el rechazo a una maternidad producto de una violación a una niña, es inmediato, pero por ser una acción irreversible hay que tener una buena dosis de conocimiento sobre el acto que se va a realizar.
Sin duda… la resolución será difícil pero es algo personal. Y legal. No tendrán ya que poner en riesgo a sus hijas al practicar un aborto de forma clandestina –como desafortunadamente se hace- donde el peligro de muerte es inminente.
Lo que no ha quedado del todo claro es si los médicos de los hospitales que así lo decidan –en honor del juramento de Hipócrates, establecido en la época moderna en la Convención de Ginebra y obligatorio en nuestro país– podrán negarse a practicar un aborto bajo ninguna excepción, lo cual sería lo correcto, sobre todo en esos casos donde la intervención no es de urgencia.
La Suprema Corte también deberá de manifestarse respecto de esta nueva situación que se presenta con motivo de su histórica ejecutoria.