- Francisco Burgoa advierte: Es una amenaza al Estado Constitucional y Democrático
- Morena intenta «suavizar» la iniciativa eliminando el control de convencionalidad
Redacción
SemMéxico, Cd. de México, 23 de octubre 2024.- El Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (GPPAN) exigió a Morena que retire la iniciativa de “Supremacía Constitucional”, pues su trasfondo es llevar a México a la autocracia y eliminar todas las alternativas legales para que la ciudadanía se defienda de actos arbitrarios del régimen en turno, afirmó la coordinadora Noemí Luna Ayala.
La coordinadora del GPPAN calificó de dictatorial la iniciativa “que pretende llevar a este país a una autocracia”, por lo que pidió sea retirada y ni siquiera sea analiza en las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos, como planteó el Senador morenista Óscar Cantón.
También llamó al coordinador de Morena, el también zacatecano Ricardo Monreal, para que impulse en la Cámara de Diputados la pluralidad y se tomen en cuenta las propuestas de la oposición, porque “lo que tenemos en puerta sí son cuestiones trascendentales para la vida democrática del país”.
Morena construye una Carta Magna a modo, dijo Luna Ayala.
Una amenaza al Estado Constitucional y Democrático
Por otra parte, en su red social de X, el abogado y profesor de Derecho Constitucional de la UNAM, Francisco Burgoa señaló que el proyecto de dictamen de reforma constitucional sobre la inimpugnabilidad de reformas a la Constitución es una amenaza al Estado Constitucional y Democrático de Derecho.
Ya se observa cómo Morena intenta «suavizar» la iniciativa eliminando el control de convencionalidad sobre reformas constitucionales. Sin embargo, ya con el presidencial, se mantiene la improcedencia de amparos, controversias constitucionales y acciones de inconstitucionalidad que busquen cuestionar modificaciones a la Constitución.
Aún más preocupante es el efecto retroactivo que pretenden imponer, donde los asuntos en trámite deberán resolverse conforme a las nuevas disposiciones del decreto, sin importar las normas vigentes al momento de su inicio. No es suficiente eliminar el control de convencionalidad; esta reforma es una regresión peligrosa para la democracia constitucional y la protección de los derechos humanos, ya que anula cualquier posibilidad de que el Poder Judicial fiscalice los excesos del legislador (y ya hemos visto la manera de legislar del oficialismo).
Esta reforma no debe ser aprobada, puntualizó en su publicación poco después de las 11 de la mañana.
SEM/sj