Botella al Mar
Martha Canseco González
SemMéxico. Pachuca, Hidalgo. 08 de febrero 2021.- La congresista norteamericana Alexandria Ocasio-Cortez, informó hace unos días en su cuenta de Twitter, que es sobreviviente de abuso sexual, algo que no había dado a conocer hasta ahora. En su twit explica que la toma del Congreso norteamericano por parte de extremistas de derecha y admiradores del expresidente Donal Trump, (me encanta cómo suena, expresidente) el pasado 6 de enero, la regresaron de golpe a ese trauma inicial. Un trauma, dice se encadena con otro.
Relata que se escondió en la parte de atrás de la puerta de su oficina, mientras escuchaba los gritos de los intolerantes: ¡dónde está ella!, la buscaban precisamente a ella por su reconocida oposición a las tretas y manejos turbios de Trump.
En ese momento, dijo, supe que todo había acabado para mí.
Ocasio-Cortez, señaló a congresistas republicanos, como Ted Cruz como unos de los responsables de lo que ocurrió ese día en el recinto, por eso, señaló no puedo permitir que en el congreso nos estén diciendo que lo olvidemos, que sigamos adelante, que no es para tanto.
Enfatizó la joven congresista ¡Esas son precisamente las mismas tácticas que usan los agresores sexuales para lograr impunidad!, nos están diciendo, en suma, ¿podemos dejar esto atrás para que lo podamos hacer de nuevo?
¡No voy a permitir que eso ocurra!, afirmó, no podemos seguir de frente si no hay personas que se responsabilicen por lo que ocurrió, no podemos sanar si no se rinden cuentas, ¡no podemos seguir adelante si no se rinden cuentas!
Igualito, igualito está pasando con MORENA y su necedad de imponer al Trump guerrerense Félix Salgado Macedonio como pre candidato a la gubernatura del estado de Guerrero. Ahora 5 mujeres víctimas de abuso sexual por parte del político, están ocultándose detrás de la puerta de sus casas porque saben que, si Salgado Macedonio llega, todo habrá acabado para ellas.
Y el Ted Cruz mexicano, es nada más y nada menos que Mario Delgado, dirigente nacional de ese partido, que con su obcecación está abriendo las puertas a la impunidad, está diciendo no sólo a esas 5 mujeres, sino a todas las de Guerrero y del país, ¡supérenlo, para que lo podamos hacer de nuevo! tal y como lo hacen los agresores sexuales.
Y es que no sólo AMLO sino MORENA también, han decidido ignorar las demandas de las feministas mexicanas incluyendo a las de su partido aplicando la rasa tabla. Es cierto, seguramente dentro de los diferentes grupos feministas de México hay mujeres que militan en partidos de oposición, pero eso no quiere decir que el feminismo sea la oposición, es muy convenientemente simplista verlo así terminan entonces minimizando toda la violencia de género, llegando incluso a negarla.
Sí no hubiera motivos que estén aglutinando a las distintas y diversas mujeres no habría tela de donde cortar, pero resulta que los feminicidios continúan y siguen sin ser investigados con perspectiva de género, la impartición de justicia por las mismas, la misoginia y la discriminación campea entre el personal de las instituciones procuradoras e impartidoras de justicia.
Mire por ejemplo en Chiapas, tuvo que ser una autoridad la que diera el visto bueno para que se incinerara el cuerpo de Mariana, la joven pasante de medicina violentada sexualmente en su lugar de trabajo e ignorada por sus jefas y jefes inmediatos y así se forman esos catálogos de crueldades, ahora no hay manera de investigar cómo es que murió la joven.
El delito de trata al alza sin que haya autoridad que la detenga, centenas de jóvenes mexicanas están desapareciendo de sus lugares de origen. Un estudio reciente reveló que la pornografía infantil en México se disparó a raíz de la pandemia que estamos enfrentando y no pasa nada.
Por eso no podemos ni debemos superar lo que está pasando con respecto, no sólo a la violencia de género, sino también las violaciones a los derechos humanos de niñas, niños, adolescentes y adolescentes, personas de la tercera edad y demás grupos vulnerados por el sistema patriarcal.
Más bien lo que se impone es lo que sugiere al final de su intervención la congresista norteamericana que no podremos seguir de frente si no hay personas que se responsabilicen por lo que está pasando, que no podemos sanar si no se rinden cuentas, ¡no podemos seguir adelante sin rendir cuentas!
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