- Advirtieron sobre médicos que solo violan los derechos humanos
Micaela Márquez
SemMéxico, Ciudad de México, 8 de noviembre del 2022.- En el “Coloquio Internacional de Estudios de Género, Lenguajes, Flujos y Luchas en los Archipiélagos Feministas” organizado por el Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG) de la UNAM, expusieron la urgencia de acabar con las violencias estructurales que impiden el libre desarrollo de las personas intersexuales en México y el mundo, coincidieron activistas, artistas e intelectuales de la comunidad intersexual que reclamaron justicia por las vejaciones que han sufrido sus cuerpos al tratar de ser ajustados a los estándares de la anatomía genital impuesta por la practica médica, el binarismo y el pensamiento rígido, así como la manera en la que se ha tratado el tema: escabroso, como un secreto familiar y una práctica médica.
Desde la definición de intersexualidad publicado en la Revista “Debate Feminista” Vol. 47 del 2013 como “todas aquellas situaciones en las que el cuerpo sexuado de un individuo varía respecto al estándar de corporalidad femenina o masculina culturalmente vigente”, y el dato del sitio de la Organización Brújula Intersexual que estima que “más de 1 de cada 150 personas nace intersexual”.
Eva Alcántara, académica de la UAM-Xochimilco, y Fabián Giménez, señalaron que cualquier cuerpo que se sale de las expectativas culturales sufre de violencias simbólicas y materiales. El mundo de hoy es más complejo y no todos los cuerpos son iguales ni caben en el binario. Por lo que es urgente acabar con las violencias estructurales que impiden el libre desarrollo de las personas intersexuales en México y el mundo.
Hortensia Moreno, directora de la revista “Debate Feminista” editada por el CIEG UNAM, señaló que, en México, en los últimos diez años, la academia, el activismo, las redes comunitarias y el arte han podido evidenciar el dolor y la brutalidad que experimentan las personas intersexuales en México y otros países de América Latina, así como el enojo y la angustia que provoca la ceguera moral y una barbarie que debe detenerse.
Falta argumentar y sostener en el espacio público, un posicionamiento de justicia y de prevención para desarmar el saber de las ciencias convencionales, ante los saberes hegemónicos del establishment médico y psiquiátrico, consideró la académica.
Respecto a los tratamientos médicos invasivos e irreversibles como la vaginoplastia, la activista Laura Inter contó que fue corregida con una cirugía feminizante, con la reducción de clítoris y el agrandamiento del canal vaginal. Al respecto Brújula Intersexual se opone a que bebés intersexuales se les someta a mutilaciones.
Ceci López Bernch, directore de Argentina Intersex, advirtió de los médicos que se anuncian como grandes salvadores y solo violan los derechos humanos de las personas intersexuales, pues consideran este tipo de variaciones sexuales como rarezas y anomalías. Expresó su deseo de que nadie vuelva a pasar por su propia experiencia, en la que ha sufrido múltiples intervenciones médicas.
Adiós al Futuro, expresó que no existe la normalidad, existen las normas para quienes tienen miedo a la vida y a la existencia. Expresó que ha pensado en el suicidio y ha usado drogas, mediante una conferencia performática relató que desde su infancia ha sido forzada a encajar para borrar su “ambigüedad genital” con toda clase de cirugías correctivas, pastillas, bombas de hormonas y corticoides.
Fabián Giménez Gatto, de la Universidad Autónoma de Querétaro, aclaró que la intersexualidad no es una identidad de género, sino una condición corporal.
En su ponencia detalló que la historia de la intersexualidad es la historia de la humanidad, e hizo un símil entre la mirada del pornógrafo y la mirada de los médicos que registraron fotográficamente los cuerpos intersexuales en el siglo XIX como cuerpos monstruosos y con genitales equívocos, expuestos a toda clase de violencias desde la erótica de la banalidad.
SEM/MG