- El King Boxing la ha salvado de la adolescencia
Lizbeth Álvarez Martínez.
SemMéxico, Cd. de México, 2 de febrero, 2022.- Entre el Monumento del Colegio Militar, el ruido de los automóviles y los árboles verdes que la arropan para dar su primera entrevista, con una voz nerviosa y pensando que responder ante las preguntas que la cuestionan a ella misma, del por qué le gusta subirse al ring y combatir, Vanessa Viridiana Salazar Julián, una adolescente de 16 años de edad, asegura que el King Boxing la ha salvado de la depresión.
“El deporte me ha ayudado a quitarme mis miedos. He sido una persona que todo le da miedo, pero he logrado ser más abierta y tener mayor confianza en mí. He sentido el bullying de mi propia familia. Me atacan en la manera que soy. No soy como ellos quieren que sea”, así lo expresa la joven peleadora.
Cabe señalar que el deporte además de ser la mejor medicina natural y emocional, representa la mejor escuela de la vida que enseña a la juventud los valores, destreza, y sobre todo el poder contraponerse a las vicisitudes.
Con toda su experiencia ante lo que es vivir una depresión, Vanessa asegura que antes por las noches se autolesionaba en las manos: “Yo he pasado por depresión y sé que se siente horrible pasarlo, por ansiedad, depresión, tristeza y sentir que nadie está ahí apoyándote. No te puedes quedarte estancada ahí por las demás personas”.
Para Viridiana todo inició hace cuatro años cuando acompañó un día a sus primas a entrenar acondicionamiento funcional y otras disciplinas deportivas, observó que había pateos, como peleaban entre los competidores, de ahí nació su pasión por practicar King Boxing a nivel de competidora.
“Tengo cuatro peleas perdidas y tres ganadas. Cuando pierdo no he sentido decepción porque di lo mejor de mí. No cualquier persona se subo a ring. En mi última pelea gané con una niña mucho mayor que yo, ella tenía 21 y yo tenía 16, me llevaba como 5 kilos, fue una pelea de dos rounds”, dijo.
El entrenamiento de Viridiana es a nivel profesional, entrena de lunes a domingo, con dos horas por la mañana y dos horas por la tarde en el ring de La Joya, en la alcaldía de Tlalpan. Cuida su alimentación para poder pelear con cualquiera que sea su rival.
Pero a lado de Vanessa se encuentra una persona muy importante, su entrenador, Juan José Becerra Juárez, quien, por cierto, acaba de recibir por parte de la Federación Mexicana de King Boxing A. C. la presea del “Guerrero Azteca 2022”.
“A mi maestro siempre le he tenido confianza, no sólo es mi entrenador es también mi psicólogo. He tenido problemas de ansiedad, depresión y él me ha sacado de ahí. Es una persona muy importante en mi vida. A mi papá no lo conozco, el maestro ha sido de alguna manera una figura paterna, está ahí, me dice que la escuela es primero antes que entrenar”.
Para Vanessa, más que estar soñando, pone todo de su parte para que sucedan las cosas, como viajar a Italia y competir.
“Quiero ir a pelear como los grandes, a un mundial u otro nacional. Me gustaría viajar a Italia o algún país europeo”.
“A mí, sí me gusta pelear, todavía tengo miedo, pero me gusta pelear, al subirme al ring y poder, he tenido experiencia que me han tocado con niñas mucho más grandes, más pesadas, de estatura y de edad. Es difícil encontrar a alguien de mi peso, pero digo, ya estoy aquí, a lo que voy. Al finalizar la pelea le queda la sensación de que sí pudo.
En marzo es su próxima pelea en la Ciudad de México, en el salón de los electricistas.
Deje de entrar un año por la depresión, me ocasiono algo en el corazón.
“Si me siento mal o triste me voy a entrenar y se me olvida todo.
Vanessa Viridiana Salazar Julián, tiene 16 años de edad, estudia la preparatoria en la escuela Otilio Montaño, pasó a segundo semestre, lleva de calificaciones 9 y 10. Quiere estudiar criminología y le gustaría certificarse como instructora de acondicionamiento funcional y en Tai Chi en algún futuro.