El senador por Nuevo León presentó una iniciativa para tipificar el delito de tortura sexual que cometan servidores públicos con el fin de obtener información o una confesión.
La Sala Superior pide que los denunciados se abstengan de realizar cualquier acto tendiente a obstaculizar el ejercicio de sus funciones y que pudieran constituir violencia política en razón de género.
Luego de una agria sesión interna del miércoles donde surgieron los gritos y descalificaciones entre unos, y otros de los senadores y senadoras de Morena, ayer regresó la cordura y la civilidad al grupo mayoritario y pronunciamientos de unidad.