Es un asunto de justicia social coincidieron legisladoras y legisladores
El dictamen ahora está en manos de la Cámara de Diputados, de su aprobación depende hacerla realidad
Elda Montiel
SemMéxico. Ciudad de México. 12 de octubre 2023.- En el Senado de la Republica se aprobaron reformas a la Ley Federal del Trabajo y la Ley del Seguro Social, a fin de establecer condiciones de trabajo justas, dignas, bien remuneradas y seguras para el sector agrario. El 83.8 por ciento de la mano de obra en el campo son hombres y 16.2 por ciento son mujeres.
En el dictamen, que fue turnado a la Cámara de Diputados, se destaca que cualquiera que sea la modalidad de contratación, de forma continua o por periodo indeterminado tendrán derecho a la seguridad social.
Asimismo, deberán contar con contrato por escrito y el registro especial de personas trabajadoras temporales a fin de registrar la acumulación del tiempo contratado a fin de establecer antigüedad para las prestaciones y derechos.
En el dictamen también se precisa que el patrón deberá promover un ambiente laboral libre de discriminación y de violencia, favoreciendo la igualdad sustantiva a través de la promoción y fortalecimiento del reconocimiento, goce o ejercicio de los derechos humanos y las libertades fundamentales en el ámbito laboral de las personas trabajadoras del campo.
Establece que las y los Inspectores del Trabajo tienen el deber de realizar visitas de inspección, por lo menos una vez al año, en temporada o estación de producción. Verificar que los salarios no sean inferiores a los determinados por la ley y que no se utilicen los servicios de niñas, niños y adolescentes.
De aprobarse el dictamen en la diputación, beneficiará al menos a 119 mil mujeres jornaleras concentradas en los estados de Baja California, Baja California Sur, Michoacán y Sinaloa, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Michoacán y Sinaloa son las entidades federativas con mayor valor de la producción agrícola, y junto a Baja California y Baja California Sur concentran una parte importante de cultivos de exportación de México, como frutillas y hortalizas, entre ellas, fresa, jitomate, frambuesa y arándano.
Razonamientos en el pleno
En la discusión en el pleno, se puso de manifiesto que el sector agrícola enfrenta condiciones laborales precarias, salarios bajos y falta de seguridad social lo que afecta su calidad de vida, y que se ha agravado en los últimos cinco años al eliminarse los programas que ayudaban a este sector.
La senadora priista Beatriz Paredes Rangel mencionó, que este dictamen aborda uno de los asuntos medulares para la justicia social en México, pues las y los jornaleros agrícolas son quienes han padecido el mayor rango de injusticia y discriminación a lo largo de la historia.
El senador panista José Alfredo Botello Montes hizo el señalamiento, de que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social haga un esfuerzo presupuestal para incrementar el número de inspectores laborales, pues sólo hay 447 personas en el país que realizan esta actividad.
El presidente de la Comisión de Reforma Agraria, Ángel García Yáñez, dijo que el tema de los derechos de las personas trabajadoras del campo a menudo pasa desapercibido en nuestra sociedad, aun cuando ellos representan “la columna vertebral” de la industria de alimentos.
El senador Joel Padilla Peña, del PT, indicó que, de acuerdo con un estudio del CONEVAL, en el segundo trimestre del 2023, en el ámbito rural la pobreza disminuyó 1.7 por ciento, sin embargo, no es suficiente, ya que se tiene que apoyar a los campesinos a enfrentar las adversidades que socavan su calidad de vida y bienestar.
Fue el senador del PRD, Antonio García Conejo, quien destacó que al campo se le ha abandonado, particularmente en los últimos cinco años, ya que se eliminaron los programas que ayudaban a este sector.
El presidente de la Comisión del Trabajo y Previsión Social, Napoleón Gómez Urrutia, manifestó que las y los trabajadores del campo en México, a menudo enfrentan condiciones laborales precarias, salarios bajos y falta de seguridad social, por ello, las reformas proponen establecer las condiciones de trabajo digno, bien remunerado y seguro para este sector.
El dictamen precisa que una trabajadora o trabajador permanente es aquel que es contratado por tiempo indeterminado, o la prestación de sus servicios es de forma continua. Mientras que la persona trabajadora temporal es aquella contratada por obra, tiempo determinado o temporada.
A la persona empleadora se le señala que deberá llevar un padrón especial de las personas trabajadoras del campo temporales, a efecto de registrar la acumulación del tiempo contratado, para la suma de antigüedad para sus prestaciones y derechos derivados del tiempo sumado de trabajo.
Se plantea que el trabajo deberá fijarse mediante contrato por escrito, y todas las personas trabajadoras deberán contar con un ejemplar. Aunque advierte que la falta del escrito del contrato de trabajo no priva a las personas trabajadoras del campo de los derechos que deriven por los servicios prestados, y será imputable a la persona empleadora la falta de esa formalidad.
Establece que, durante la jornada de trabajo, se les brindará una alimentación sana, suficiente y variada, con agua apta para consumo y uso humano, en cantidad suficiente, así como servicios sanitarios adecuados e independientes a cada sexo, en cantidad suficiente y proporcional al número de personas.
Plantea que la persona que fuese contratada para residir temporalmente en un centro de trabajo distinto donde tiene su residencia habitual, el empleador tendrá a su cargo el traslado seguro y cómodo de aquél, el de su grupo familiar y las pertenencias de todos ellos, desde el lugar de contratación al de ejecución del contrato, cuando se iniciare la relación y de regreso al terminarse el vínculo.
Se imponen multas a la persona empleadora que viole las normas protectoras del trabajo del campo, y cuando no proporcione habitaciones o estas no cuenten con las condiciones mínimas, así como para cuando no se proporcione alimentación, agua y sanitarios.
Las Jornaleras
En 2019, un reportaje de Diana Juárez refleja la difícil situación de las mujeres jornaleras. Ella escribió “ entre más rápido recolecten los frutos u hortalizas, más ganancias pueden obtener las mujeres jornaleras del Valle de San Quintín en Baja California.
“ Para conseguirlo se les exige rapidez lo que ha provocado accidentes que no son considerados como tal. Incluso, para evitar que vayan al seguro, el mayordomo de cuadrilla, es decir, el encargado de ese pedazo de tierra les sugiere que se vayan a su casa a descansar y regresen al día siguiente, dice Amalia Cruz, integrante de la organización Mujeres en defensa de la mujer en ese valle.
Desde hace 3 años el oficialismo proyectó un Centro de Justicia para las Mujeres, que todavía está en construcción , según se lee en el FB oficial del CJM, un grupo informa que visitó la zona y ve el proceso de construcción. El Centro debería erigirse en San Quintín, Baja California, y deberá ofrecer atención especializada para jornaleras agrícolas en uno de los epicentros de la producción de exportación de fresa y frutillas a nivel nacional. Esa página informa que por ahora sólo hay módulos.
En el Valle de San Quintín muchas de las mujeres jornaleras son el sustento de sus familias, ya sea porque se separaron o sus esposos se fueron a trabajar a Estados Unidos, cuenta Amalia. Por no perder su trabajo callan los abusos que han padecido, como hostigamiento, discriminación o violaciones a sus derechos laborales como darlas de baja en el seguro social.
“El problema más grave es que son trabajadoras sin un derecho, muy pocas están afiliadas al seguro social. Hemos encontrado datos muy preocupantes, dan de alta a las trabajadoras una semana y después las dan de baja, cuando van al seguro es cuando se dan cuenta, reclaman en recursos humanos y en ese momento las vuelven a dar de alta”, relata Amalia.
De incorporarse al IMSS, una parte de sus necesidades más sentidas, tendrán como hacerlas exigibles, tanto en salud, como en previsión social.