Los derechos están pero no para todas las mujeres, Sara Patricia Cerna Villagra
Nueva generación de líderes indígenas en la academia y en la política
Elda Montiel
SemMéxico, Ciudad de México, 10 de noviembre 2024.- Falta mucho por hacer respecto a las acciones afirmativas para las mujeres indígenas y afromexicanas, a pesar de que es un orgullo para los pueblos originarios verse representados.
Lo que se detecta es que hay la simulación por parte de los partidos políticos, según expusieron activistas indígenas en el marco de la 3ª Feria del Libro INE, Género, Inclusión y Democracia, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE).
La consejera Rita Bell López Vences, aseguró que actualmente, desde la autoridad electoral, se busca llevar la voz de las mujeres indígenas y afrodescendientes a favor de sus necesidades, a los congresos donde su participación no es tan amplia.
Lo dijo al moderar la presentación virtual del libro “Tres décadas de activismo político de mujeres indígenas y afrodescendientes en México (1990-2023)”, y enfatizó que es un gran esfuerzo y un acierto el recuperar las voces de las mujeres indígenas y afromexicanas, tanto como dimensionar las condiciones reales en las que ellas viven.
Para comentar el libro participaron las activistas indígenas y afromexicanas Rogelia González Ruíz y Greta Esteofenes Ventura Lemus, Subsecretaria de Prevención de la Violencia de Género de la Secretaría de las Mujeres del Estado de Oaxaca y la integrante de las Redes de colectivas de mujeres afromexicanas y para el avance de las mujeres, respectivamente.
Rogelia González que viene del movimiento político de los 80s celebró el recuento histórico de las luchas de los diversos movimientos indígenas en el país que se hace en el libro, para “que se conozca todo lo que se ha hecho para que las nuevas generaciones tengan acceso a la educación y a la salud, ya que las ancestras muchas no pudieron ir a la escuela”, agregó que estos testimonios servirán para que no se repitan las discriminaciones, racismo y violación a los derechos humanos.
“Cuando yo leo el libro que empieza desde 1990 a tener esta mirada de las luchas indígenas, me remonta a la lucha zapatista, a la Lucha del Movimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en donde fue para todo el mundo una irrupción de esta fuerza tan grade de la voz de una mujer que toma el congreso para denunciar y para decirle al mundo que necesitaba una solidaridad de todos para que pudieran tener acceso a la educación, a la vivienda, para que pudieran tener acceso a la salud, a los derechos que cualquier ciudadano y ciudadana tienen por el hecho de ser un mexicano, una mexicana”.
En tanto Greta Ventura Lemus, de las nuevas generaciones de mujeres indígenas, oriunda de la Costa Chica de Guerrero señaló que existe mucha confusión en reconocerse como descendientes afros, porque les da la sensación de no pertenecer al territorio, es más común identificarse como negros, morenos o costeños.
Precisó que lucha por la visibilización se da porque quieren ejercer sus derechos en libertad sin violencia y ella aspira a ser servidora pública, sin embargo señalo que se supone que todas las mujeres en el país obtuvieron el voto en 1953, sin embargo en las montañas de Guerrero en 2022 no se les permitía a las mujeres votar para una elección primaria y esas son las realidades que atraviesan los pueblos originarios.
También mencionó la simulación que se da en los partidos políticos para ocupar las acciones afirmativas, “claro que hay un avance para las y los hermano indígenas es un orgullo ver que uno de nosotros llega a un puesto de elección popular pero todavía no es fácil registrar una candidatura indígena en los partidos políticos porque siguen limitando el acceso”.
Hay una nueva generación de mujeres indígenas en la academia y en la política
Para la autora del libro, Jefa del Departamento de Antropología de la UAM-Iztapalapa, Laura Raquel Valladares de la Cruz, el recorrido histórico que se realiza en el libro permite tener una visión general de cómo ha transitado la construcción de las mujeres indígenas como actoras políticas que inciden en la vida política nacional.
Destacó que en la dos últimas décadas, se ha formado un grupo de nuevas líderes, estamos viendo una nueva generación de mujeres muy potentes, con formaciones muy importantes académicas y políticas; esto le ha dado un nuevo rostro al movimiento.
Si algo distingue al Movimiento Indígena Nacional y al movimiento de mujeres es justamente este nuevo grupo de jóvenes, que ha hecho aportes, no solamente en la agencia política, sino en las reflexiones teóricas; esos son todos los aportes fundamentales que hay.
Precisó que son 68 pueblos indígenas a lo largo del territorio y que existe una diversidad de mujeres y organizaciones principalmente en Oaxaca, Chiapas y Guerrero, cuyas agendas tiene una carácter distintivo, unas luchan por territorio, otras por participación policía y económica, los que les da una carácter distintivo, y lo principal que se les da voz.
“Me centré fundamentalmente en el nivel del Congreso de la Unión, de la Cámara de Diputados especialmente, porque me parece que nos permite ver distintas dimensiones de la relación de las mujeres con sus pueblos, digamos, con el panorama político nacional. Discutir cómo se han creado estos espacios de cuotas afirmativas, de género, indígenas y afromexicanas, para ver cómo han funcionado.
La coordinadora de la serie “Paridad de género y respeto a los derechos humanos de las mujeres en el ámbito político electoral” a la que pertenece el libro, Sarah Patricia Cerna Villagra, señaló que queda claro que en América Latina México es un país de avanzada en la paridad, pero también sabemos que no es igual para todas las mujeres, “los derechos políticos de las mujeres ahí están pero en las condiciones reales no”.
La idea era poner esas luchas que siempre han estado ahí, pero como decían muchas investigadoras indígenas, ha sido la Academia quien ha puesto las voces y el momento también de ir dialogando.