Lorena Piedad
SemMéxico, Pachuca, Hgo., 25 de enero, 2022.- ¿Qué significa ser mujer y desaparecer en México? ¿Cuántos rostros vemos en fichas de búsqueda compartidas en redes sociales todos los días? ¿Dónde están? ¿Quién se las llevó? ¿Por qué?
Lamentablemente hace unos días tuve que contactar a Sonrisas Perdidas Hidalgo para solicitar ayuda con una ficha de búsqueda: Dulce Candelaria López Jiménez, de 16 años, desapareció en la Ciudad de México el 17 de enero de 2022 aproximadamente a las 2 de la tarde porque en este país no necesita ser de noche para que sucedan las atrocidades.
“Seguramente se fue con el novio”, fue el primer comentario que escuché de muchas personas. Su madre y su padre contaron a familiares que no tenía un novio y muy pocos amigos. Dulce salió de trabajar ese lunes, cuidaba y paseaba a unos perros, un trabajo que amaba y que culminaba a las 2 de la tarde. Sus patrones la dejaron cerca del metro Acatitla donde solo debía caminar unas cuadras para llegar a su casa, lo cual no sucedió.
Su madre y su padre no sabían qué hacer, no estaban informados sobre solicitar acceso a las cámaras de seguridad para comprobar que efectivamente llegó a la estación del metro y entonces verificar qué sucedió con ella. Solo pensaron en denunciar la desaparición.
Sonrisas Perdidas Hidalgo pidió una serie de datos que comparto ahora con la esperanza de que Dulce esté viva y esté a salvo:
Nombre completo: Dulce Candelaria López Jiménez. Edad: 16 años. Fecha de desaparición: 17 enero 2022. Ciudad donde desapareció: Ciudad de México. Señas particulares: Dos lunares pequeños en mejilla derecha. Cicatriz en la ceja derecha de 3 centímetros. Estatura: 1.70 metros. Tez: Blanca. Complexión: Delgada. Cara: Redonda. Ojos: Rasgados, café claro. Cejas: Pobladas. Cabello: Color castaño. Frente: Amplia. Nariz: Recta. Boca: Mediana. Labios: Gruesos. Mentón: Sobresaliente amplio. Ropa que vestía al momento de la desaparición: Pantalón de mezclilla azul, sudadera negra con la imagen de Batman, chamarra gris con cierre fosforescente. Calcetines polares con rayas moradas. Tenis negros con lila con letra S en la lateral, marca Skechers. Gargantilla color plata con una cruz pequeña de pedrería. ¿Dónde se le vio por última vez? Avenida Zaragoza, cerca del metro Acatitla.
El Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDO) reveló que, en la última década, en México se ha reportado la no localización de 3 mil 241 mujeres adolescentes de entre 12 y 17 años como promedio anual, es decir, nueve cada día.
En los primeros seis meses de 2021 se superó la mitad de esa cifra: 484 niñas de 0 a 17 años que estaban desaparecidas, de mil 541 que han sido reportadas extraviadas.
Dulce es parte ahora de esas estadísticas
Su padre Cipriano ha levantado diversas denuncias, no hay respuesta. Su madre Adriana está devastada con su ausencia, no hay respuesta. Le escribieron mensajes por Whatsapp, llegan, pero no hay respuesta. ¿Dónde estás, Cande?
Nos llaman exageradas porque decimos que los piropos son acoso, porque destruimos monumentos, porque rompemos vidrios, porque exigimos justicia, porque nombramos a las víctimas de feminicidio y nombramos a las desaparecidas. ¿Dónde estás, Cande?
Vivir en México es salir a las calles con miedo sin importar si es de día o de noche, es desconfiar de cualquier persona que se te acerque, es caminar a prisa por lugares solitarios, cambiar de banqueta si alguien se acerca a ti, es ver rostros de desaparecidas, de desaparecidos pegados en los postes, en la publicación de un conocido en redes sociales. ¿Dónde estás, Cande?
Hoy escribo en nombre de cada persona desaparecida, recuerdo el rostro triste de la mamá de Gustavo, un niño que tenía 12 años cuando desapareció en 2007 en las calles de Pachuca, Hidalgo. Ya es 25 de enero de 2022 y no saben su paradero. Percibo la desesperación de la madre y el padre de Dulce Candelaria, pero no me atrevo a imaginar su dolor. ¿Dónde estás, Cande?
Borrador. Es indescriptible lo sucedido con Lourdes Maldonado López, periodista asesinada el domingo afuera de su domicilio. Que terror ser mujer en México. Que terror ser periodista en México. Que terror es vivir en México.