Mujeres sometidas a sistemas de justicia negligentes: AsíLEGAL

Fecha:

Compartir:

“¡Es como volver a nacer!”, dice tras obtener su libertad anticipada

* Yamel vivió violencia reiterada de su pareja y omisiones de las instituciones

Elda Montiel

SemMéxico, Cd. de México, 22 agosto 2019.- “Es como volver a nacer, hasta el aire se respira diferente”, dice con una sonrisa omnipresente durante su primera cena en libertad Yamel, quien hace 11 años fue detenida por un conflicto en el que ella terminó con la vida de su ex pareja.

En vías de generar un nuevo proyecto de vida, Yamel a través de los esfuerzos de Asistencia Legal por los Derechos Humanos (AsiLEGAL), se convierte en un caso de éxito. La audiencia de Yamel marca una pauta en torno la implementación de la Ley Nacional de Ejecución Penal en Baja California, se trata de una victoria prácticamente anunciada. 

Los acuerdos probatorios logrados entre fiscalía, defensa y representante del CERESO, consiguieron una audiencia fluida y cómoda en la que cada una de las partes actúa con buena fe para promover lo que, a fin de cuentas, todos quieren y que pronuncia con palabras finales la juez de ejecución: “Salga y diga que la reinserción social sí existe”.

AsiLEGAL señala que el proyecto de vida detenido desde tiempo antes del conflicto con la ley penal, se puede retomar con la posibilidad de que los lastres sociales, los abusos e incapacidad de responder a éstos sirvan como un recordatorio de lo que una pareja violenta puede destruir.

El caso de Yamel es significativo pues, una vez más, recuerda la posición de vulnerabilidad a la que son sometidas las mujeres en el sistema de justicia, sin apoyo de ningún tipo, a razón de género con una absoluta negligencia para atender claras señales, repetidas, de violencia familiar y de género.

En marzo de 2008, hace 11 años, Yamel fue detenida por un conflicto en el que ella, después de 8 años de relación y al menos 4 años de violencia de género, terminó con la vida de su ex pareja.

Yamel, al tiempo de haberse relacionado con su ex pareja, comenzó a recibir cada vez más ataques —verbales, físicos y psicológicos— mismos que también sucedían con frecuencia. 

Las golpizas que vivió Yamel fueron tales que la llevaron a ser hospitalizada más de una vez. La relación con su pareja, no , una denuncia ignorada ante el ministerio público, pues “no tenía suficientes golpes”, según comentó, continuó sin el apoyo o acompañamiento necesario para salir del círculo de la violencia. Con 3 hijos, Yamel se encontraba completamente sumergida en una relación asimétrica de poder donde él, también, era su único sustento económico.

Al momento de llevarse a cabo el juicio por el homicidio calificado en relación de parentesco no consanguíneo los elementos del abuso y el aislamiento de un contexto de violencia y adicción perpetuados por su pareja, no fueron determinantes para dictar su sentencia. 

De haber sido así, aplicar una perspectiva de género hubiera cambiado profundamente el futuro de la vida de Yamel. En el momento de su juicio, de cualquier manera, no fueron suficientes factores para extinguir su culpabilidad por defensa propia —y la defensa de uno de sus hijos— y fue sentenciada a 16 años privada de libertad.

La audiencia de Yamel marca una pauta en torno la implementación de la Ley Nacional de Ejecución Penal en Baja California, se trata de una victoria prácticamente anunciada. 

Los acuerdos probatorios logrados entre fiscalía, defensa y representante del CERESO, consiguieron una audiencia fluida y cómoda en la que cada una de las partes actúa con buena fe para promover lo que, a fin de cuentas, todos quieren y que pronuncia con palabras finales la juez de ejecución: “Salga y diga que la reinserción social sí existe”.

Los 16 años se convirtieron, finalmente, en 11 años, cinco meses y seis días en total de detener el proyecto de vida. 

“Por supuesto que lo que más me emociona es reunirme con mis hijos, pero también ya quiero poder hacer las cosas por mí misma. Ahí dentro todo lo hacen por ti. Ya no más. Me emociona aprender a vivir de nuevo, quiero trabajar, conseguir una casa y, en su momento, reunirme con mis niños”, señala Yamel.

SEM/em/sj

Artículo anterior
Artículo siguiente

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí



Artículos relacionados

Letra Clara| ENTORNOS LABORALES SEGUROS Y RESPETUOSOS PREVIENEN  IMPUNIDAD

Ante la realidad que nos  estremece conocer las estadísticas sobre  feminicidios y desaparecidas en México,  se percibe la violencia en un  tránsito impune desde el hogar,  al  centro de trabajo y a la  calle.

Bellas y Airosas| Doctora Jazmín Georgina Licona Olmos, hasta pronto

Un amable rostro se asomó a mi cubículo y muy discretamente murmuró: ¿Puedo hablar con usted? Me llamo Jazmín Licona Olmos. Vengo a visitarla porque nadie en el  Instituto de Ciencias Básicas e Ingeniería trabaja género y vine a pedir su asesoría”.

Mirada Violeta| Aborto en Jalisco. La transición de un delito a un derecho

Entre 1990 y 2016 se registraron a nivel nacional 32 mil 284 muertes maternas, de las cuales 2 mil 418 estuvieron relacionadas con abortos; 305 fallecimientos fueron de niñas y adolescentes de entre 10 y 18 años de las cuales el 70% había sido víctima de violación, según cifras del Observatorio de Muerte Materna.

Los capitales| Demandan la ONU y la CEPAL nuevas estrategias para reducir desigualdades

Ante los organizadores de la Segunda Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social a celebrarse en 2025, directivos de la CEPAL y la ONU destacaron que el evento  es una gran oportunidad para reducir desigualdades y promover la justicia social y la no discriminación.