Por: Lizbeth Álvarez Martínez
SemMéxico. Cd. De México. 30 de diciembre 2020.- “¿Por qué no me había de doler con lo que está pasando con los feminicidios, si es un problema social, en donde todos estamos involucrados, en donde todos lo estamos viendo? Nos estamos dando cuenta de cosas horribles”, expresó el artista, Pablo Tonatiuh Álvarez Reyes, uno de los creadores Proyecto Sirenas.
En entrevista, el fotógrafo indica que, con su trabajo, integrado por trece imágenes que reflejan las violencias que viven las mujeres, busca concientizar y crear un panorama de la situación actual de las mujeres en México, la cual conoce muy bien.
Señala “cómo la violencia en escalada nos lleva hacia el feminicidio, y los feminicidios están al tope en el lugar donde yo vivo, en el Estado de México, Nezahualcóyotl. Al lado de mí está Ecatepec. Es una zona conflictiva”. Ambos municipios concentran altas cifras de feminicidios. El Estado de México se ubica en el primer lugar nacional de feminicidios, de enero a noviembre, al registrar 132, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Un referente más para documentar su trabajo y elaborar las composiciones de corte surealista, a través de la técnica de Tableu Vivant, fue el libro de La fosa de agua: Desapariciones y feminicidios en el río de los Remedios, de Lydiette Carrión.
Recuerda un párrafo del texto en donde encontraron 6 mil restos óseos, cuando drenaron el Río de los Remedios para poner la tubería. “El gobierno del estado dijo que la mayoría eran de animales. Esa fue su manera de deslindarse del por qué habían encontrado tantos huesos…” Es así como el artista gráfico ha observado las distintas formas de violencia feminicida.
¿Por qué representar sus fotografías con figuras de sirenas?, se le cuestionó. Aseveró que una sirena es un ser mítico. Icónicamente, la sirena en el arte siempre se ha hecho para representar la maldad de la mujer.
“Sentí que la figura de la sirena funcionaba perfecta para hablar del tema… El hecho de vivir una violencia tan continua todo el día, hace que cuando ves la foto y ves a una mujer que es una sirena, pero –en este contexto– inmediatamente hay una relación de entender de qué estás hablando en el trasfondo”, continuó con su explicación.
Para el artista visual, el arte tiene una función social; sin embargo, “a veces va en contra del estatus quo. Pocas veces el arte contestatario va estar financiado por las instituciones”. En su caso, ha recibido apoyos de manera individual, más que institucional.
En esta serie, cada fotografía plasma diferentes tipos de violencia. Se trata de temas muy delicados, donde más que mostrar escenas gráficas de los maltratos que sufre la mujer, busca que quienes las vean no se volteen, al asombrarse con escenas explícitas, sino que más bien, se dé el tiempo de observar y reflexionar sobre el mensaje que trae cada imagen y, con ello, crear una conciencia social.
“Cuando las mujeres han visto la foto de manera digital, inmediatamente perciben un acto de violencia. Lo contario de la comunidad masculina, ellos tienen que hace un esfuerzo más para identificar los detalles de las fotografías e identificar la violencia.
Álvarez Reyes asegura que no es lo mismo ser mujer que ser hombre, a cada minuto del día: “Yo salgo y quizá me tengo que preocupar de que no me roben, de algún enfrentamiento. Ser mujer es completamente distinto, desde que entras a un lugar de como estás vestida, de cómo te miran los hombres”.
El fotógrafo, director, guionista y editor es egresado de la licenciatura de Periodismo y Comunicación, de la Universidad Nacional Autónoma de México. Estudió cine en la Asociación Mexicana de Cineastas Independientes y guionismo en el Centro de Capacitación Cinematográfica.
Asimismo, la película Amores perros lo llevaron a decidir que quería hacer cine. “Quiero expresar todas las cosas que yo estoy viviendo y que pienso sobre la humanidad, de lo que tiene que ser la humanidad, pero a través del cine”, apuntó.
“Siempre tengo esa cosa en la cabeza. De qué manera podemos hacer un cambio significativo en la sociedad a través de lo que hacemos”, reflexionó el también autor de la serie de fotografías, “Sin Olvido”.