Elda Montiel
SemMéxico. Cd. de México. 17 de septiembre de 2019.- México tiene una de las tasas más bajas de participación femenina en comparación con países que tienen un nivel menor de desarrollo, la brecha es de 34 puntos porcentuales, que lo coloca en el tercer lugar de América Latina para la inserción económica para las mujeres.
Nadine Gasman, titular del Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) destacó que es fundamental eliminar la desigualdad salarial, la discriminación, exclusión, segregación, el acoso y hostigamiento sexual y otras formas de violencia, por lo que se requieren un mayor número de espacios de trabajo, que permitan el desarrollo de capacidades y proyectos de vida.
En el marco de la ceremonia de entrega del reconocimiento a 73 centros de trabajo certificados en la Norma Mexicana NMX-R-025-SCFI-2015 en Igualdad Laboral y No Discriminación en 2018, de los cuales 40 son del sector privado y 33 del sector púbico, en el que se destacó que la Norma es un estándar de referencia en América Latina, y en 2018 se tomó como una guía para crear un sistema de derechos humanos en Paraguay.
Con la certificación en la Norma 025, que es la norma en para la igualdad laboral, los centros de trabajo dan un importante paso contra la desigualdad salarial con efectos negativos para las mujeres.
La norma en la materia, que se aplica desde 2015, tiene como beneficios contar con un programa de reclutamiento y selección de personal sin discriminación y con igualdad de oportunidades, garantizar la igualdad salarial y el otorgamiento de prestaciones y compensación y la integración de la planilla de personal con al menos 40 por ciento de un mismo sexo.
La presidenta del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), Alexandra Haas, indicó que en el país vivimos discriminación estructural; tres de cada 10 mujeres han vivido discriminación y violencia laboral en sus centros de trabajo principalmente por parte de sus compañeros y jefes.
Además, el 9 por ciento ha recibido menos salario que un hombre aun cuando realizó las mismas actividades y tuvo el mismo puesto, situación que evidencia la discriminación y desigualdad que enfrentan las mujeres en este ámbito.
Agregó que estamos llenos de prejuicios y estereotipos acerca de quiénes son los que pueden realizar ciertos trabajos. Existen sesgos implícitos que se tienen que erradicar como la práctica de presentar y requerir fotografía en los currículum, “porque nada nos dice acerca de lo que la persona es o no capaz de hacer”.
La secretaria del Trabajo y Previsión Social (STPS), Luisa María Alcalde Luján, resaltó que la obtención de la certificación de la norma sobre igualdad y no discriminación es el inicio del proceso, ya que se trata de asumir un compromiso, no solo en los centros de trabajo, sino como ejemplo para otras empresas y otros esquemas, que hoy no están generalizados.
A la fecha, el padrón nacional vigente, cuenta con 380 centros de trabajo certificados 2018, con lo que se benefician 821 mil 40 trabajadores, de los que 370 mil 813 son mujeres y 433 mil 497 hombres.
Entre las instituciones públicas certificadas están la STPS, el Senado, el Poder Judicial del estado de México y el Infonacot.