Guadalupe Ramos Ponce
SemMéxico, Guadalajara, Jalisco, 23 de abril, 2024.- La justicia social, la paz y el desarrollo sostenible son los tres temas centrales que se vinculan a la educación transformadora en el marco de la Semana de Acción Mundial por la Educación (SAME) 2024 que es el llamado mundial por la defensa del derecho humano a la educación.
Millones de estudiantes, docentes, activistas, defensoras y defensores de derechos humanos, así como autoridades de más de cien países del mundo, nos movilizamos en torno a la Semana de Acción Mundial por la Educación en este año 2024 (SAME en español, GAWE por sus siglas en inglés), lo que constituye la mayor movilización mundial entorno a la defensa por el derecho humano a la educación.
Entre el 22 y 26 de abril, la movilización demanda a los Estados la debida atención y priorización sobre una educación que genere transformaciones que profundicen la justicia social y el desarrollo, sin discriminaciones ni violencias de ningún tipo.
Desde hace 23 años la Campaña Mundial por la Educación (CME), motiva un tema de relevancia común para los más de cien países que se suman a la iniciativa de la Semana de Acción Mundial por la Educación. En este año, 2024, hace un llamado de acción urgente para destacar la necesidad de políticas educativas de transformación inclusivas que garanticen el acceso y permanencia de todas las personas a lo largo de la vida, en todas las modalidades y niveles, esto es desde la primera infancia hasta la Educación de Personas Jóvenes y Adultas (EPJA).
El derecho humano a la educación aporta a las sociedades su potencial transformador, y actualmente cobra un nuevo sentido cargado de demandas por la inclusión, la no discriminación y las condiciones de bienestar colectivo y la paz, por ello subraya el carácter de justicia social. El desarrollo sostenible, por su parte, tiene muchos desafíos que mantienen vigente el debate en la región latinoamericana y caribeña sobre la crisis climática, los bienes naturales y los territorios.
La sociedad civil ha desempeñado un papel fundamental en la conquista y defensa de los derechos humanos, entre ellos la educación, por lo que sigue siendo un actor relevante en el escenario nacional, regional e internacional de diálogo e incidencia con representantes de los Estados y personas responsables de la implementación y sostenibilidad de políticas públicas que garanticen el derecho humano a la educación.
La Campaña Mundial por la Educación (CME), señala que existe un enorme poder desde la educación para transformar las realidades, por ello “desafía los intentos de enmarcar la educación únicamente en un conjunto limitado de resultados de aprendizaje. Cree que la educación transformadora impulsa la justicia social, el desarrollo sostenible y la libertad individual y colectiva”.
“Para que la educación sea transformadora, es necesario transformar la educación” así lo manifiesta el documento político sobre la Educación Transformadora que comparte la Campaña y que propone ampliar los debates sobre las transformaciones necesarias en y a través de la educación con perspectiva integral, para ello es necesario transitar hacia las culturas de derechos humanos y de democracia, superando la colonización, el capitalismo, el extractivismo y el patriarcado.
La convergencia entre la educación transformadora y la transformación de la educación combina cambios necesarios en las instituciones educativas de todos los niveles, para “ofrecer un presente mejor y salvaguardar el futuro”.
El objetivo de la Semana de Acción Mundial por la Educación (SAME) 2024 es el llamado mundial por la defensa del derecho humano a la educación e insta a los gobiernos, sobre la necesidad de hacer real y efectivo el derecho humano a una educación pública, gratuita y de calidad para todas y todos.
Dra. María Guadalupe Ramos Ponce
Coordinadora de CLADEM en México
Profesora Investigadora de la UdeG.
@dralupitaramosp