Isabel Ortega Morales
SemMéxico, Chilpancingo, Gro., 21 de febrero, 2022.- Crisanta habla Me’Phaa, Tlapaneco, llega con un niño de dos años, la escucho hablar con él en español. Después de la reunión le pregunto si le está enseñando a hablar su lengua materna y me dice rápidamente que no. Le pregunto ¿por qué? Me dice que no quiere que lo discriminen cuando crezca y vaya a los Estados Unidos, por eso, agregó, lo tiene registrado como nacido en Chilpancingo porque un problema de complicación obstétrica la llevó a buscar mejores cuidados médicos en la Capital.
Con suavidad le hablo de la importancia de su lengua materna y de que no desaparezca. Me escucha, fija su mirada en mí y guarda silencio. Un silencio que se prolonga durante algunos minutos hasta que entra su hermano y le entrega unos documentos hablándole en su lengua materna. Les digo que me da gusto escucharlos y Jesús, su hijito, sonríe al oírlos, “les entiende” le digo, ella asiente con la cabeza. “Será fácil para él aprender” le digo. Charlamos un largo rato durante una capacitación donde la lectura es importante. El niño nos observa y sonríe cuando le pido a Crisanta me haga comentarios en Tlapaneco.
El sábado en la explanada del Ayuntamiento de Tlapa celebraron el día de la Lengua Materna. Y fue poca la asistencia de hablantes de las tres lenguas que se hablan en la montaña alta, en el corredor de la montaña baja, mezcala y otros puntos del estado, como Acapulco.
Fue relevante escuchar en Tlapaneco el Himno a Guerrero, el Himno Nacional y el Juramento a la Bandera Nacional en voz de niñas y niños de la Localidad La Lucerna del Municipio de Malinaltepec, que fueron de los primeros en llegar al evento donde el último en hacerlo fue el Edil que en su intervención, tras un saludo en su lengua materna a las autoridades de su Cabildo y en español a las y los asistentes poniendo énfasis a las autoridades educativas, al Diputado Masedonio y al representante de la Gobernadora Evelyn Salgado Pineda…no dijo nada, y se fueron a revisar la comida que prepararon y la exposición artesanal que llevan en cada evento, Edil que además, ¡salió corriendo!.
Así, la diversidad lingüística del estado con cuatro lenguas vivas, Náhuatl, Me’Phaa- Tlapaneco, Tu’Un Savi, Na’Savi- Mixteco, Ñonda- Amuzgo, no pareció tan relevante. No se habló de la importancia de preservar como legado, me dicen que poco a poco se va perdiendo el trabajo artesanal de elaboración de huipiles por los altos costos de los materiales y la baja compra por su precio.
En la montaña de Guerrero las mujeres mantienen el legado del habla de la lengua originaria pero la determinación final corresponde a los varones. En esta región los Usos y Costumbres están más enfocados a resolver la vida cotidiana que en resolver el patrimonio cultural. No hay un símbolo de identidad que les concite y motive. Quieren resolver el día a día, lo demás lo miran como asunto privado donde determinan si continúa o no.
Y de esto no se habló, salvo la intervención del escritor Me’Phaa Florentino Solano, oriundo de Metlatónoc, que ha publicado ocho libros, y que hizo hincapié en la importancia de preservar la lengua materna para no perder la identidad y la historia de los pueblos originarios… coincidimos con él. Ojalá deje de ser la fecha una exposición y sea un inicio de motivación a preservar la lengua materna, el efecto pluricultural sustentada en nuestros pueblos indígenas y su propia vida que ha sobrevivido a la historia misma, pero que tiene riesgo latente de desaparecer lo que sería muy grave porque, además, perderíamos una cosmovisión de la vida. Ojalá las mujeres, que representan el 51.3 por ciento de las hispanohablantes de los pueblos originarios recuperen el control de la continuación de la Lengua Materna enseñándola a sus descendientes.