El presunto delito por el que ahora se le acusa es por un ataque a las vías de comunicación, que no es más que la “criminalización de la protesta”, aclaró su abogada.
Alejandro “Alito” Moreno, presidente del PRI, tiene ya quizá 10 días hablando de la supervivencia de la Alianza Va por México, esa que con sus veleidades y traiciones mató, cremó y enterró al impulsar la iniciativa de extensión de las fuerzas armadas en tareas de seguridad.